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¡La Velocidad de la Luz!

Autor por Emilio Silvera    ~    Archivo Clasificado en Constantes universales    ~    Comentarios Comments (31)

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La luz se mueve tan rápidamente que nuestra experiencia cotidiana no nos induce a pensar que el valor de su velocidad pueda ser finito. Es comprensible, por tanto, que los científicos creyesen (o incluso diesen por sentado) hasta el siglo XVII que la luz se transmitía de forma instantánea.

La luz la podemos ver de muchas maneras, y, los rayos son una forma de radiación electromagnética que se forman con las tormentas. Los rayos son el elemento más espectacular de una tormenta eléctrica. Por otra parte, también la materia que resulta ser energía, y, cualquier clase de materia, en las debidas circunstancias puede emitir luz, es decir, emite cuantos de luz: fotones que es la manera de expresarse de la materia bariónica que es la que podemos ver y forman las estrellas, las galaxias y también a nnosotros los seres vivos “inteligentes”.

Isaac Beeckman, en 1629, sugirió determinar la velocidad de la luz observando el reflejo de un cañonazo en un espejo distante, y Galileo Galilei en 1638 diseñó un experimento basado en la medida del tiempo transcurrido en el intercambio de señales luminosas entre dos personas.

En ambos casos, es fácil ver que interviene el tiempo de respuesta del ser humano, un factor limitante que echó por tierra sus intentos. En efecto, la velocidad es la distancia recorrida por una entidaqd dividida por el tiempo que necesita para recorrerla. Si queremos realizar medidas de una velocidad muy elevada, necesitamos medir tiempos muy pequeños, o bien disponer de distancias muy grandes. Esta última opción indica que la Astronomía puede ofrecernos soluciones interesantes. Precisamente fue el astrónomo danés Röemer (1644–1710) quien calculó en 1676, a partir de los eclipses de las lunas de Júpiter, que la velocidad de la luz era aproximadamente 225.302 km/s.

Esquema ojo humano

La reflexión de la luz, es un fenómeno que se produce practicamente en todas las superficies a las que llega. Gracias a ese fenómeno es por lo que nosotros podemos ver la mayoría de las cosas que nos rodean: los árboles, las montañas, los animales y a las personas. Sin embargo, no todos los objetos reflejan la luz de la misma forma. Algunos la reflejan de manera más ordenada que otros. Tampoco la luz tiene la misma velocidad en todos los medios por los que puede correr.

Ejemplo reafracción en astros

Además como en la atmósfera hay turbulencias, la densidad del aire varía permanentemente, haciendo cambiar la dirección en que llegan los rayos de luz, con lo cual las estrellas parecen estar cambiando de posición. Este fenómeno se conoce como titilación.

También desde una perspectiva astronómica, el Físico inglés James Bradley utilizó la aberración estelar (el desplazamiento aparente de las estrellas debido al movimiento de la Tierra alrededor del Sol) para determinar la velocidad de la luz en el vacío, obteniendo un valor de 3.o1 x 108 ms -1 respectivamente (e. g. French 1988).

Más adelante llegarían aportaciones desde distintos campos de la Física. Así, con ayuda de ruedas dentadas o espejos rotatorios, los franceses Hippolyte Fizeau (1849) y Léon Foucault (1862), y el estadounidense Albert Michelson (1929) hicieron uso de montajes ópticos para obeter respectivamente, los valores 3.15 x 108 ns -1, (2.980 ± 0.005) x 108 ms -1 y (2.991 ± 0.0005) x 108 ms -s. A partir de la determinación precisa de las unidades de carga eléctrica y magnética, Kohlraush y Weber (1857), y Dosey y Rosa (1907) obtuvieron los valores 3.1070 x 108 ms -1 y (2.9979 ± 0.0003) x 108 ms -1 respectivamente (vid Froome y Essen 1969).

Albert Abraham Michelson.JPG

El valor adoptado para la velocidad de la Luz

Más recientemente, se suceden los experimentos, con precisiones crecientes, hasta que, en 1983, se define el metro como la distancia recorrida por la luz en el vacío en un intervalo de tiempo de 1/299792458 de segundo. De esta manera, se adopta un valor fijo para la velocidad de la luz en el vacío que, resulta ser de 299.792.458 metros por segundo.

El equipo de este trabajo, formado por Ivan Marti-Vidal (actualmente en Max Planck-Institut für Radioastronomie, en Alemania ), Sergio Jiménez Monferrer y Carlos Cruz Molina (del Departamento de Astronomía y Astrofísica de la Universidad de Valencia, finalizan el trabajo (del que he omitido toda la parte técnica, ecuaciones y explicaciones más engorrosas) diciendo:

“Hemos estimado la velocidad de la luz en el vacío usando un método observacional basado en el cronometraje de las ocultaciones de la luna joviana Ío, producida durante la primavera de 2007. Este método de medida es esencialmente el mismo similar al utilizado por Ole Römer en el año 1677, si bien nuestro método es una modernización del de Römer en varios aspectos, tanto en la toma de datos (con cronómetro), como en el tratamiento y análisis (ajustando los intervalos de tiempo entre ocultaciones con el método de mininos cuadrados). El valor estimado de esta manera para la velocidad de la luz es (2.85 ± 0.09) 108 ms -s, un valor a poco más de una desviación estándar (1 sigma) del real.

Tanto el método observacional como el fundamento teórico en que éste se basa son bastante sencillos. Este experimento puede ser realizado sin problema a nivel de Instituto, sin requerir material de alto coste (sólo un  modesto telecopio y un reloj).

Aunque el trabajo está adornado y contiene algún que otro anexo, la base principal está en el trabajo publicado por los científicos antes mencionados en la Revista Española de Física, Volumen 24 nº 3 de 2010.

LA LUZ

De todos los fenómenos físicos, los relacionados con la luz posiblemente sean los más fascinantes e intrigantes. Las preguntas ¿qué es la luz?, ¿cómo es posible la visión?, ¿qué son los colores?, ¿cómo se forman los arco iris?, etc. han preocupado al ser humano desde siempre, siendo la historia de los esfuerzos por responderlas un aspecto central de las ciencias físicas.
El estudio de la luz, denominado óptica, normalmente se divide en dos secciones: Propagación de la luz, en que se abordar la óptica sobre la base de la noción de rayo de luz (razón por la cual se denomina óptica geométrica) y Naturaleza de la luz, en el que se estudia la óptica considerando la luz como un fenómeno ondulatorio (en este caso hablaremos de óptica física).

A) La rapidez de la luz

Según las referencias históricas, quien primero intentó medir la rapidez de la luz fue Galileo Galilei (1564-1642) haciendo señales con una lámpara a otra persona situada a una distancia conocida. Si bien el método empleado por Galileo no era incorrecto, la gran rapidez con que viaja la luz, hacía impracticable el experimento.

El primero en medir esta rapidez, en 1675, fue el astrónomo danés el Olaf Römer (1644 – 1710) a través de la observación de los satélites de Júpiter. Ellos giran alrededor de este planeta demorando cierto tiempo en completar una órbita. Cuando el planeta se encuentra más alejado de la Tierra, el movimiento de sus satélites parece retrasarse debido a que la luz que proviene de ellos demora más tiempo en recorrer una distancia mayor. La precisión obtenida con este método no fue muy buena, pero tuvo el mérito de probar que la luz no se propagaba de forma instantánea.

En 1849, Hippolyte Fizeau (1819 – 1896) mide la velocidad de la luz dentro de un laboratorio. Su método consistió en interceptar un rayo de luz reflejado en un espejo con los dientes de una rueda giratoria. El resultado de las mediciones indicaba que la luz tendría una rapidez de 313.274 km/s en el aire. Años más tarde, en 1880, el físico estadounidense Albert Michelson (1852-1931) logra mayor exactitud con una técnica similar. Su método consiste en hacer girar con la rapidez exacta un sistema de espejos en el que se refleja un rayo de luz. Hoy se define la rapidez de la luz, en el vacío, como 299.792.456 m/s y se la designa con la letra “c”. Para efectos de cálculo, a menos que se indique algo diferente, empleamos la aproximación c = 3 x 108 m/s. Del mismo modo, aunque en el aire esta velocidad es levemente menro, también se emplea el mismo valor que par el vacío.

B) Los fenómenos de luz y sombra

Solamente mirando el borde de un objeto, como el marco de una puerta o una regla, sabemos si éste se ajusta o no a una recta. ¿Por qué? Porque intuitivamente partimos del hecho de que la luz se propaga en línea recta. Otra evidencia de su propagación rectilínea surge del análisis de las sombras. Si un punto P emite luz, una esfera opaca Q producirá en una pantalla o telón una sombra circular, tal como se ilustra en la figura.

Ejemplo fenómeno de luz y sombra

 

Por otra parte, una mitad de la esfera estará iluminada y la otra estará sumida en la oscuridad. Si la fuente no es puntual, como se aprecia en la figura, veremos además una zona de penumbra.

Estos fenómenos de luz, sombra y penumbra son bastante habituales en la vida diaria, pero donde resultan espectaculares es en el ámbito astronómico, particularmente en el caso de los eclipses. En efecto, el día y la noche, las fases de la Luna y los eclipses de Sol y de Luna son fenómenos de luz y sombra. Las siguientes figuras ilustran estos fenómenos.

Fases Lunares

Las diferentes fases lunares para un observador en la Tierra, corresponden a la forma en que este satélite es iluminado por el Sol,

Fase Lunar

Eclipses

En la figura se observa como la luna proyecta su sombra sobre la Tierra,  generando un eclipse de Sol.

Diagrama fases de la Luna

Diagrama de eclipse

 

Cuando la Tierra proyecta su sombra sobre la Luna, oscureciéndola, estamos frente a un eclipse lunar.

Diagrama fases de la Luna

 

Otro hecho que pone en evidencia la propagación rectilínea de la luz es la cámara oscura. Como es muy fácil de hacer, se recomienda que la construyas y realices algunas observaciones y experimentos con ella. Como se ilustra en la figura, basta una caja de cartón y un pedazo de papel diamante.

Diagrama cámara oscura

Diagrama cámara oscura

 

Bajo el mismo principio de la cámara oscura funcionan el ojo y la cámara fotográfica. Las principales partes del ojo humano se ilustran en la siguiente figura.

C) La reflexión de la luz y los espejos

La luz se refleja prácticamente en todas las superficies a las que llega. Gracias a este fenómeno es que podemos ver la mayoría de las cosas que nos rodean: los árboles, las montañas, los muebles y las personas. Sin embargo, no todos los objetos reflejan la luz de la misma forma. Algunos la reflejan más ordenadamente que otros.

Creo que no hemos llegado a comprender lo que es realmente la luz. En ella, están guardados los misterios más importantes de la Naturaleza y, sospecho que, hasta la explicación más sencilla y real de la materia, está ahí en la luz escondida. Creo que todo en el Universo es Luz, la materia y la energía y… ¡la Vida! tqambién es una manifestación de la luz que, en definitiva, viene a ser la manifestación última y más alta del Universo, en ella están cómodamente instalados todos los secretos que tratamos de descubrir y que, hasta que no conozcamos lo que es la Luz, no podremos comprender el resto de las cosas.

emilio silvera

 

  1. 1
    Johnny
    el 29 de abril del 2011 a las 15:42

    Hola, tengo entendido que la energía eléctrica según el conductor que se utilice para trasportarla se comporta de diferente manera, en cuánto a la velocidad en que viaja y también a la cantidad de energía que es posible conducir.
    Los rayos de una tormenta eléctrica lógicamente parecen utilizar el aire como medio conductor de tales cantidades de energía; ¿las velocidades de la luz varían según el medio conductor por el que viaje?, adquiere la misma velocidad el conducir la luz tanto por el aire como por el agua por ejemplo?. Saludos.

    Responder
  2. 2
    nelson
    el 30 de abril del 2011 a las 0:11

    Hola Johnny.
     
    Buena intuición. La luz no necesita conductores, aunque los hay, (como la fibra óptica).
    El rayo sí necesita conductor (las partículas atmosféricas ionizadas), al igual que su sonido (trueno), pero su luz (relámpago) no. En todo caso se podría hablar de medio donde se propaga, o a través del que circula, aunque también se propaga en el vacío.
    Aquí tienes una buena respuesta a tus preguntas:
    http://mx.answers.yahoo.com/question/index?qid=20070323212129AAVdsTR
    Igualmente se esperan otras opiniones.
     
    Saludos cordiales.
     

    Responder
    • 2.1
      Johnny
      el 30 de abril del 2011 a las 0:37

      De acuerdo, según tengo entendido entonces el medio por el cual se propaga la luz, influye sobre su velocidad, la velocidad estimada que obtiene por medio del vacío o el aire sería de 300.000 km/s.
      Si se diera el caso de que pudiera propagarse por un medio mucho más ligero que el aire o el vacío, ¿hipotéticamente superaría ese límite impuesto a la velocidad de la luz c?.

      Muchas gracias Nelson por tu esclarecedora respuesta, un saludo.

      Responder
  3. 3
    nelson
    el 30 de abril del 2011 a las 2:14

    Leo en Wikipedia que la velocidad de la luz en el vacío es de 299.792,458 km/s. El vacío, obviamente es el medio más ligero que existe. Luego, en el aire, de acuerdo al Índice De Refracción (IOR) que nos dicen  l@s compañer@s de Yahoo-Respuestas, 299.792,46 X 1,00029= 299.879,39 km/s (velocidad de la luz en el aire).
     
    “Una evidencia experimental reciente demuestra que es posible para la velocidad agrupada de la luz exceder c. Un experimento hizo que la velocidad agrupada de rayos láser viajara distancias extremadamente cortas a través de átomos de cesio a 300 veces c.”
    Leer más en: http://es.wikipedia.org/wiki/Velocidad_de_la_luz
    Saludos.

    Responder
    • 3.1
      nelson
      el 25 de octubre del 2018 a las 2:13

      ¡¡Qué burrada!!…
      Después de 7 1/2 años, me doy cuenta de la barbaridad que escribí: que la velocidad de la luz en el aire es superior a c!! Ocurrió que multipliqué la velocidad c por el Índice de Refracción del aire cuando debí dividir: 299792,46 ÷ 1,00029= 299705,54. Nunca es tarde para corregir…
      Saludos cordiales.

      Responder
      • 3.1.1
        emilio silvera
        el 25 de octubre del 2018 a las 5:04

        Vamos evolucionando amigo Nelson

        Responder
  4. 4
    Martín Jaramillo Pérez
    el 19 de septiembre del 2014 a las 13:13

    En la ciencia suceden cosas muy curiosas. Siempre, a lo largo de la historia, que se ha medido la velocidad de la luz se han obtenido valores diferentes. Se piensa que son dificultades normales de medición. y se “decreta” o se “Pontifica” que la velocidad de la luz “c” es constante en el vacío. Y todo el mundo acepta. Quieres conocer la demostración geométrica que hizo un disidente. Solicítala gratuitamente a: martínjaramilloperez@gmail.com

    Responder
  5. 5
    emilio silvera
    el 19 de septiembre del 2014 a las 16:44

    Lo cierto, amigo Martín, es que la velocidad de la luz en el vacío ha sido verificada en múltiples ocasiones y, siempre, ha dado el mismo resultado de 2.997 924 58 x  108 m/s. Esa es la velocidad que le damos a c, velocidad relativista de la luz que, medida en muchos frentes distintos, por distintos científicos y en distintos lugares, siempre resultó la misma y, por eso, precisamente, se la tiene como una constante univrsal.
    Es posible que lo que dices: “…la demostración geométrica de un disidetnte.”, no sea la demostración más adecuada para contradecir la velocidad de c en el vacío predicha en la relatividad especial y constatada en tántos experimentos y mediciones.
    De todas las maneras y, como hay que estar abierto a todo, también, a la posible NO constancia de la Luz en el vacío, nos podemos adaptar pero, para que eso ocurra, tienen que demostrarnos de manera muy contundente que, el resto de las mediciones efectuadas hasta la fecha… ¡Son erróneas! Y, eso amigo mío, no parece fácil.
    Saludos.

    Responder
  6. 6
    Emilio Silvera
    el 19 de septiembre del 2014 a las 16:51

    En cualquier sitio que mirémos, nos dirá lo mismo. El lugar más accequibles, Wikipedia, nos dice:

     

    “La velocidad de la luz en el vacío es por definición una constante universal de valor 299 792 458 m/s (aproximadamente 186 282.397 millas/s)2 3 (suele aproximarse a 3·108 m/s), o lo que es lo mismo 9.46·1015 m/año; la segunda cifra es la usada para definir al intervalo llamado año luz.

    Se simboliza con la letra c, proveniente del latín celéritās (en español celeridad o rapidez).

    El valor de la velocidad de la luz en el vacío fue incluido oficialmente en el Sistema Internacional de Unidades como constante el 21 de octubre de 1983,4 pasando así el metro a ser una unidad derivada de esta constante.

    La rapidez a través de un medio que no sea el “vacío” depende de su permitividad eléctrica, de su permeabilidad magnética, y otras características electromagnéticas. En medios materiales, esta velocidad es inferior a “c” y queda codificada en el índice de refracción. En modificaciones del vacío más sutiles, como espacios curvos, efecto Casimir, poblaciones térmicas o presencia de campos externos, la velocidad de la luz depende de la densidad de energía de ese vacío.”

    Al menos por el momento, es la cantidad que prevalece después de muchas, muchas, muchísimas mediciones hechas por distintos medios y lugares que, ¿casualidad? coincidieron.

    Responder
  7. 7
    Martín Jaramillo Pérez
    el 20 de septiembre del 2014 a las 15:58

    Con todo el respeto que se merecen:

    Todos los resultados históricos de las mediciones de la velocidad de la luz se presentan en tablas. Porque siempre son diferentes.
     
    Algunos experimentadores y sus resultados
     
     Año Experimentador Método Resultado (km/s)
    1849 Fizeau Rueda dentada 315.000
    1862 Foucault Espejo giratorio 298.000±500
    1872 Cornu Rueda dentada 2980500±1000
    1879 Michelson Espejo giratorio 299.910±50
    1924 Michelson Espejo giratorio 299.802±30
    1926 Michelson Espejo giratorio 299.798±15
    1932 Michelson, Pease and Pearson Espejo giratorio 299774±4
    1936 Anderson Célula Kerr 299.771±10
    1950 Bergstrand Célula Kerr 299.793,1±0,26
    Ver más: 
     
    http://www.portalplanetasedna.com.ar/luz.htm
     
    Pruebas acertadas

    Albert Abraham Michelson (1852-1931), en 1879, durante una reunión de la Asociación Americana para el Progreso de la Ciencia, presentó el método que había utilizado para determinar la velocidad de la luz, que halló ser de 300091 km/s, si bien en 1926, como consecuencia de los estudios que realizó en el observatorio de Monte Wilson, dio como valor más correcto el de 299520 Km/s.

    En Estados Unidos, colaboró con Edward W. Morley (1838-1923) para realizar una serie de experimentos con el interferómetro para conocer la influencia que el movimiento de la Tierra pudiera ejercer sobre un supuesto éter. Estos trabajos probaron la constancia de la velocidad de la luz, siendo la base del principio de la relatividad de Einstein. En 1907 recibió el premio Nobel de Física.

    En 1907 Rosa y Dorsey lograron un valor de 299788 Km/s, el más exacto hasta el momento.

    Se han empleado otros métodos para mejorar la exactitud. En 1958, Froome llegó al valor de 299792.5 Km/s, mediante un interferómetro de microondas y una celda Kerr. A partir de 1970 con el desarrollo de aparatos de láser con una estabilidad espectral muy grande y relojes de cesio exactos, ha sido posible mejorar las medidas, llegando a ser conocida con tan sólo un error de un m/s.
    Comentario: la velocidad de la luz es una de las constantes fundamentales de la naturaleza. A lo largo de la historia se ha medido su valor mediante diversos métodos siendo medida actualmente con una precisión un metro por segundo.

    Un metro por segundo en matemáticas y en el cosmos es una atrocidad.
    Un metro por segundo son 60 m/min y 3.600 m/h., por esa sencilla razón, la luz no es constante. En el cosmos eso es mucha distancia. Los tiempos cosmológicos son abismales, para pretender que 1 m/seg. no vale la pena.
     
    Cuando todas las medidas de la velocidad de la luz sean iguales se podrá decir que “c” es constante. Las matemáticas son exactas, “c” es una medida estadística, pertenece al campo de las probabilidades, por lo tanto es parte de la física cuántica.
    “c” no es una constante. Es una velocidad promedia. La ciencia, si se apoya en las matemáticas se debe basar en la exactitud de las mediciones y si no se puede lograr la exactitud se recurre a la estadística.

    Todas las maco-medidas en el cosmos son estadísticas porque nadie puede saber y precisar todos los movimientos reales del cosmos, la astronomía debe ser cuántica.

    Responder
    • 7.1
      Emilio Silvera
      el 22 de septiembre del 2014 a las 7:23

      Amigo Martín, no podemos estar seguros de que todo lo que creemos que sabemos responde, a la realidad de la Naturaleza, y, como bien sabes, a lo largo del Tiempo, muchas de las teorías que fueron válidas en un tiempo, tuvieron que ser renovadas en otro Tiempo posterior. Nuevos datos, nuevos experimentos, nuevos aparatos tecnológicos más avanzados… Nos llevan poco a poco hacia esa verdad que incansables perseguimos.

      Casi no merece la pena discutir “demasiado a fondo” sobre algunos temas (la velocidad de la luz podría ser uno de ellos), toda vez que, como antes digo, el Tiempo tendrá la última palabra pero, mientras tanto, debemos apoyarnos en algunas creencias para continuar el camino basados en algo que, estimamos lo más acertado… ¡Por el momento!

      Siempre ha sido igual y continuará siéndolo.

      Nunca lo sabremos todo sobre todo.

      Siempre surgirán nuevas cosas, nuevas teorías, nuevos modelos.

      Eso se llama: ¡Construir futuro!

      Un abrazo amigo.

      Responder
    • 7.2
      nelson
      el 26 de octubre del 2018 a las 1:13

      Debe haber algún error por allí . ¿Cómo puede haber un margen de error en el valor de c de 1m/s (un metro por segundo) si precisamente la definición de metro es la distancia recorrida por la luz en el vacío en 1/299 792 458 partes de un segundo?
      Saludos cordiales.

      Responder
  8. 8
    Martín Jaramillo Pérez
    el 22 de septiembre del 2014 a las 11:05

    Gracias a Emilio Silvera por liderar este foro tan importante.

    Responder
  9. 9
    Gabriel Rossello
    el 2 de marzo del 2017 a las 12:02

    Me parece increíble que el Universo, que parece infinito, tenga la velocidad de la luz como una barrera que no se puede superar. De hecho, S. Hawking afirma que con ello podríamos viajar al futuro. Te dejo el video para indagar: https://gabrielrosselloblog.wordpress.com/2017/03/02/luz-velocidad-y-viajes-en-el-tiempo/

    Responder
    • 9.1
      Emilio Silvera
      el 2 de marzo del 2017 a las 17:45

      Gracias Ganriel por los enlaces muy curiosos y, en el segundo video he dejado un comentario, ya que, se olvidan de mencionar algunos aspectos relativos a lo que podría ocurrir si un tren viajara a velocidades cercanas a la de la luz.

      Saludos cordiales.

      Responder
    • 9.2
      emilio silvera
      el 24 de octubre del 2018 a las 10:32

      En el enlace que nos dejas dices…
       

      los seres humanos no podemos soñar siquiera en superar este récord, y como mucho podemos imaginarnos tratando de alcanzarlo en algunos miles de años.”

      Está claro que eso no será nunca posible, y, como mucho, podríamos imaginar la manera de burlar la velocidad de luz tomando algún recodo que, como un “agujero de gusano”, por ejmplo, nos llevara más deprisa al lugar de destino sin tener que burlar ese limite universal que es la velocidad de la luz que, como se ha explicado muchas veces, tiene implicaciones que hacen imposible el sobrepasarla, la física de nuestro Universo no lo permite.
      En otra secuencia de tu enlace dices:

      “… Así pues, ya sabéis, si queréis “regresar” al futuro no tenéis más que coger tanta velocidad como os sea posible de tal forma que como el Delorean de Dog desafiéis la velocidad de la luz. De todos modos, no creáis que es algo sencillo…”

      Se ve que el papel lo admite todo y se puede escribir en él cualquier cosa que nnos podamos imaginar: ¡Coger tanta velocidad como sea posible y regresar al futuro! ¿Qué tontería es esa? Las licencias literarias están bien en las novelas de ciencia ficción, donde se pueden exponer situaciones que, siendo imaginarias, podrán ser o no ser posibles en el futuro en el que “casi” nunca, se podrían producir. No es que sea difícil el regresar al futuro, es que se habla de regresar a un lugar que no existe, en el que nunca pudo estar nadie, el Tiempo que está por venir, y, si nunca existió ese lugar… ¿Cómo se puede hablar de regreswar a él?

      Mejor dejarlo aquí, ya que, hablar por hablar…











      Responder
  10. 10
    Diego
    el 24 de octubre del 2018 a las 5:59

    Que pasaría si ” vamos en una nave a la velocidad de la luz y dentro de esta encenderiamos una linterna o una mira lacer?

    Responder
    • 10.1
      Pedro
      el 24 de octubre del 2018 a las 8:11

      Muy buena sugerencia, si en el interior de la supuesta nave los procesos se relentizan por la dilatación del tiempo.
      Resulta que la luz interior de la nave no puede viajar a (c) por tanto problema mayúsculo.
      La velocidad constante de la luz, en este caso no se sostiene.

      Responder
    • 10.2
      emilio silvera
      el 24 de octubre del 2018 a las 8:15

      Bueno, si apuntas con el láser en la misma dirección de la marcha, la luz que despide iría también a 299.792.458 m/s, y, si la sumamos a la velocidad de la nave, estaríamos duplicando esa velocidad. Sin embargo, como supuesto imaginario está bien, en la realidad, ninguna nave podría alcanzar dicha velocidad, ya que, a medida que se fuese acercando a la velocidad de c, se iría frenando (el tope que impone el universo), y, la energía cinética de la nave se converttiría en masa en función de E=mc2 ,
      Salvo mejor parecer.

      Responder
      • 10.2.1
        emilio silvera
        el 24 de octubre del 2018 a las 8:21

        El enunciado dice que la nave marcha a la velocidad de la luz, y, en ese caso, es el Tiempo el que se ralentiza para los viajeros, y, siendo así, la luz láser seguirá su camino sin importarle a que velocidad marche el Tiempo. La luz, irá a la misma velocidad a la que se mueven los fotones que la conforma por el Espacio “vacío”.

        Responder
  11. 11
    Fandila Soria
    el 24 de octubre del 2018 a las 12:17

    Si lo oscuro no existe es que todo es claro. En nuestra mente quiero decir.

    ¿De qué se compone lo que llamamos vacío? Qué existe entre dos rayos de luz o dos fotones.
    ¿ Es la luz una perturbación del vacío? ¿Y cómo en él, algo como el fotón puede presentar un velocidad constante que presentan las olas del mar o el tiempo que nos incumbe? ¿Es la luz principio y fin?
    En qué se diferencian onda y onda partícula. ¿Qué misterio guarda el fotón que no se compone de nada tangible y según cuando presenta masa?
    Qué materia más extraña que sea origen, cero masa, sin más evolución que sus parámetros. Y aún así que hay más allá de fotón o que hubo antes del propio Big-Bang. 
    Que no podamos entenderlo, pobres de nosotros, pequeños dioses de la materia que nos conforma, no significa que todo se circunscriba a nuestro pequeño y particular universos.
    Y es que pese a todo y a nuestra sabiduría ¡hay infinidad de cosas que no nos cuadran! Somos tan pequeños…
    A las evidencias nos remitimos.
    Presuntamente no entendemos al fotón o qué lo sustenta, pero lo dominamos para nuestro servicio sin importarnos tal cosa.
    ¿Pero es que no existen más universos o dimensiones mas allá que la nuestra…? ¿Y cómo pasar de una a otra “como Pedro por su casa”?

    “Cosas veredes si al su tiempo fueres”  Y que así se cumpla.

    Responder
    • 11.1
      Emilio Silvera
      el 25 de octubre del 2018 a las 4:40

      ¡La luz! ¡El Tiempo! ¡El Vacío! ¿De qué están hechos? ¿Qué son en realidad? Me pregunto si alguna vez, podremos llegar a comprender lo que realmente significan todos esos términos de cuyos significados (pobre de nosotros), creemos saber alguna cosa.

      El fotón que nos resulta tan familiar y amigable, es uno de los secretos mejor guardados del Universo y, a veces, me pregunto: Si no tiene masa y tiene energía como podemos decir que la fórmula E=mc2 es cierta, es decir, masa y energía son dos aspectos de la misma cosa, y, sin embargo el fotón es energético y no tiene masa (en reposo) y, desde luego, que se sepa nadie ha visto nunca un fotón en reposo.

      Como bien nos dice Fandila: “no entendemos al fotón o que lo sustenta”. Sin embargo, no dejamos de hablar de él como si no tuviera ningún secreto para nosotros… ¡Así somos de pretenciosos! No son pocas las veces que damos por sentado cuestiones de las que, en realidad, no tenemos ni la menor idea, y, nos dejamos llevar por la imaginación, por lo que creemos que debería ser y, a la vuelta de unos años… ¡Todo se va al garete al descubrir que, durante todo el tiempo estuvimos equivocados!

      La Luz, el vacío, el Tiempo, el multiverso…. ¡La búsqueda continúa!

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  12. 12
    kike
    el 24 de octubre del 2018 a las 22:14

      Si según los estudios más conservadores indican que solo en nuestra galaxia debieran existir miles de civiizaciones inteligentes(aunque quizás reducidas, o mejor dicho distribuidas drásticamente por el tiempo),  y por otra parte no tenemos constancia aún de su existencia, bien pudiera ser que el atroz límite de la velocidad de la luz y de las enormes distancias que nos separan sean completamente infranqueables; que todo eso de burlar esa constante no sea factible. 

     Si ello fuera así, nos encontraríamos con la aparente contradicción de vernos eternamente solos aún rodeados de miles de planetas con vida inteligente; y eso contando solo con nuestra galaxia..¿Que será de los cientos de miles de galaxias restantes?; da vertigo con solo comenzar a imaginarlo…

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    • 12.1
      Emilio Silvera
      el 25 de octubre del 2018 a las 4:50

      Como la Naturaleza es “sabia”, es posible que sabiendo como somos, haya dispuesto que los mundos habitados estén separados por distancias insalvables (por el momento), ya que, lo que haríamos en el caso de poder llegar a esos otros mundos habitados es algo que… ¡No quiero ni pensar! Algunos han pensado en ello y, la película Avatar refleja bien el panorama de lo que podría ser.

      Esas distancias insalvables para nuestro tiempo, seguramente será posible de eliminar con la tecnología y los conocimientos de un futuro que está muy, muy, muy lejano del presente. Si realmente evolucionamos lo suficiente para poder entender que no todo es nuestro y que cada cosa está donde está porque así lo dispuso el destino y lo debemos respetar y no violentarlo, que podemos mirar sin tocar…

      En otras civilizaciones situadas en mundos lejanos de nuestra propia Galaxia o de otras galaxias, pasará exactamente lo mismo que nos pasa a nosotros, ellos tampoco tendrán los medios para visitarnos, las estrellas han tardado 10.000 M., de años en crear la materia de la que estamos hechos y otros 4.000 M en hacer que la materia evolucione hasta alcanzar la consciencia.

      Si eso es así (como creo que lo es), falta mucho, mucho, muchísimo tiempo para que podamos, al fín, hablar de ese contacto que tantas veces hemos imaginado y de cuyo resultado tenemos una gran interrogante encima de nuestras cabezas, ya que, lo que pueda pasar cuando eso ocurra… ¡Es un gran misterio!

      A partir de aquí podemos seguir imaginando escenarios que podrían ser.

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  13. 13
    Emilio Silvera
    el 25 de octubre del 2018 a las 4:54

    Además, se podría dar el caso de que, no seamos nosotros los que protagonicemos ese encvuentro, sino que, una nueva especie artificial por nosotros creada, sea la que tome el relevo y lleve a cabo tal hazaña. “Ellos” no necesitan dormir, no comen, no se cansan, son ¿inmortales? y, si además, le damos nuestras más queridas posesiones… Es decir, le damos conciencia, el poder de pensar y generar ideas… ¡Apaga y vamonos!

    Nosotros, con nuestra manera de actuar, podemos ser los causantes de nuestra propia destrucción.

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  14. 14
    Fandila Soria
    el 25 de octubre del 2018 a las 6:59

    Aunque este feo decirlo, nuestra “burda” dimensión de materia normal, por lo que tiene de mayor en la evolución (Eso es un decir) no es comparable a las dimensiones subsistentes que la procuran. De dónde si no procede y en que se basa. ¿Volveremos a aquella creación “espontanea” de un supremo hacedor, como por capricho? Y nada tengo contra esa concepción, pero sí en que la realidad demuestra que todo es más complejo y maravilloso.

    Se nos apunta y demuestra que elementos materiales entrelazados, es decir más menos de igual procedencia, se comunican, están en contacto por algo, o algos, que les comunican las propiedades comunes, nada menos, lo que les hace que se comporten de una manera  idéntica. Pero además esa “comunicación” de manera instantánea, o casi.

    Cómo podría ser de otra manera. Podrían estos elementos, o no tan elementos, permanecer en su evolución común, es decir, siendo lo que son. De no ser así, no habría dos partículas iguales a millones de años luz como así se nos aparece. Y no es cuento, pues así se experimenta.
    Sin llegar tan hondo, se sabe que a menor masa (NO puede haber materia-energía alguna que no presente masa), cuando dicha masa sea menor que la del fotón, (Ese componente mayoritario último de nuestra dimensión) su velocidad en el sutil medio en que se mueven necesariamente ha de ser mayor que la del fotón (Así se explica el por que la expansión de Universo supera a c, por ejemplo).
    Nada puede ser y no ser al mismo tiempo para la misma cuestión.
    La Nada no existe, el vacío no es la nada. Su escalonada sutileza nos indica que también existen materias-energías no comparables a la normal, en las que, sin embargo, ésta se apoya (Como de ser su sustento y origen). Algo que no ha de faltar si se considera su infinito.

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    • 14.1
      emilio silvera
      el 25 de octubre del 2018 a las 10:15

      Lo cierto amigo, es que cuando entramos en ese “mundo” de lo muy pequeño, podemos contemplar situaciones que están muy alejadas del sentido común, y, sin embargo, ahí están. Allí, en la prtofunda región cuántica, donde viven los objetos más pequeños (y a la vez necesarios) de nuestro Universo, se producen comportamientos tan extraños que, no siempre, podemos entender: Entrelazamiento cuántico, fluctuaciones de vacío, transcisiones de fase, la “nada” que resulta estar llena a rebosar… ¿Qué lugar fantástico es ese?
      Pués, al menos, hemos podido llegar a comprender que sin ese extraño lugar, no existiría éste otro nuestro, es decir, la región macroscópica en la que que convivimos con objetos que, como nosotros mismos, están conformados, precisamente, de esos otros minúsculos que llamamos partículas subatómicas que, repartidas (según sus funciones) en familias de Quarks y Leptones, resuoltan ser las responsables de todo lo que podemos ver y tocar, y, además, para cumplir con sus cometidos están apoyadas por esas otras partículas bosónicas o transmisoras de las cuatro fuerzas fundamentales que hacen posible la existencia de todo lo que existe como materia, energía y fuerzas.
      Si nos paramos a observar las mil maravillas que conviven con nosotros y a las que no prestamos atención… Simplemente hay que fijarse en el átomo, una cosita tan pequeñita que tiene tal complejidad que, describirlo, requeriría un gran libro al exponer todo lo que ahí está presente y las cosas que pasan.
       

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  15. 15
    Pedro
    el 25 de octubre del 2018 a las 10:02

    Haber, que se nos ocurre, entropia , dilatación del tiempo y lenguaje.
    Resulta que la dilatación del tiempo afecta a todo proceso físico allí donde acontece, excepto a la propia propagación de la luz. (¿Como afectaría al propio espacio como fenómeno físico, esta supuesta dilatacion? )
    No obstante nos cuentan ,si resulta que es una única identidad (espacio/tiempo)
    Se contraerán al unisino ¿Esto hay forma posible de asumirlo, hablando en cristiano?. Y no analíticamente con ecuaciones.

    Segundo: todo tiende al desorden, entropia, bien esta no afecta a la inexorabilidad del propio tiempo, ¿Es la única excepciónalidad? ¿Y el el propio espacio es afectado por la entropia? No habrá otros componentes físicos, hechos físicos que tengan esa excepcionalidad, por ejemplo el lenguaje.
    Las civilizaciónes no perduran, cierto, no obstante sus recursos estilísticos, si quedan impresos y si no se deteriora el soporte dónde queda impreso, nosotros podemos aprenderlos de nuevo, rememorandolos de nuevo, refrendando de nuevo su valor estilístico o no, o de cualquier índole.

        ¿Al tiempo presente, podriamos extrapolar sus sinergias de entonces.?

    En resumen:

    “El lenguaje único tesoro que ni el moho, ni el orin corroen”. Lourdes Gil

        
    “No es el tiempo el que dicta la corrosión de las palabras.”
     

    Objecion, si desaparece toda civilización, ¿Quien o que validara todo lo demás? Las leyes físicas:¿Podríamos afirmar que perduraran? Diríamos que si, no obstante, si resulta que nadie está allí, todo un sin fin esperpentico. ¿De que estaríamos hablando? Entelequias sin más.

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    • 15.1
      emilio silvera
      el 25 de octubre del 2018 a las 11:47

      Amigo mío, hay que entender que el Universo nos trajo para que ÉL tuviera algún sentido, ya que, sin observadores que cuenten sus hazañas, pobre Historia sería.

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