Jul
24
Conociendo el Universo
por Emilio Silvera ~
Clasificado en Astronomía y Astrofísica ~
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Como pregona la filosofía, nada es como se ve a primera vista, todo depende bajo el punto de vista desde en el que miremos las cosas.
“Lo primero que hay que comprender sobre los universos paralelos… es que no son paralelos. Es importante comprender que ni siquiera son, estrictamente hablando, universos, pero es más fácil si uno lo intenta y lo comprende un poco más tarde, después de haber comprendido que todo lo que he comprendido hasta ese momento no es verdadero.”
Douglas Adams
¿Qué vamos a hacer con esta idea antrópica fuerte? ¿Puede ser algo más que una nueva presentación del aserto de que nuestra forma de vida compleja es muy sensible a cambios pequeños en los valores de las constantes de la naturaleza? ¿Y cuáles son estos “cambios”? ¿Cuáles son estos “otros mundos” en donde las constantes son diferentes y la vida no puede existir?
En ese sentido, una visión plausible del universo es que hay una y sólo una forma para las constantes y leyes de la naturaleza. Los universos son trucos difíciles de hacer, y cuanto más complicados son, más piezas hay que encajar. Los valores de las constantes de la naturaleza determinan a su vez que los elementos naturales de la tabla periódica, desde el hidrógeno número 1 de la tabla, hasta el uranio, número 92, sean los que son y no otros. Precisamente, por ser las constantes y leyes naturales como son y tener los valores que tienen, existe el nitrógeno, el carbono o el oxígeno.
Esos 92 elementos naturales de la tabla periódica componen toda la materia bariónica (que vemos y detectamos) del universo. Hay más elementos como el plutonio o el einstenio, pero son los llamados transuránicos y son artificiales.
Jul
18
Algunas estrellas podrán facilitar la existencia de Vida
por Emilio Silvera ~
Clasificado en Astronomía y Astrofísica ~
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Hay una veintena de estrellas que se encuentran dentro de un radio de acción marcado por los doce años-luz de distancia al Sol. ¿Cuál de ella se nos presenta como la más probable que, algunos de sus planetas pudieran albergar alguna clase de vida, incluso Vida Inteligente? La estrella más cercana a nosotros es Alfa Centauri que, en realidad es un sistema estelar situado a unos 4.37 años-luz de nosotros (unos 42 billones de kilómetros). En realidad, se trata de un sistema de tres estrellas.
Alfa Centauri contiene al menos un planeta del tamaño terrestre con algo más de la masa de la Tierra que está orbitando a Alfa Centauri B. Sin embargo, su cercanía a la estrella, unos 6 millones de kilómetros lo hace tener una temperatura de más de 1.ooo ºC lo que parece ser muy caliente albergar alguna clase de vida.
Alfa Centauri, seguramente por su cercanía al Sol, ha ejercido siempre una sugestiva atracción que la Tierra.
Algunos cree que dentro de un Millón de años, otra estrella se acercará peligrosamente,,,
Las tres estrellas se formaron a partir de la misma nebulosa de materia interestelar. El trio de estrellas se van orbitando las unas a las otras a un ritmo como de vals, unidas por los lazos invisibles de la fuerza gravitatoria que generan y con la que se influyen mutuamente. Lo cierto es que las estrellas triples gozan de pocas probabilidades para albergar la vida, porque no pueden mantener a sus planetas en una órbita estable y segura, la inestablidad que producen las tres estrellas en esos posibles planetas, parece que sería insoportable para formas de vida inteligente. Claro que, las distancias a las que se encuentran unas estrellas de otras es grande y… ¿quién sabe? Nunca podemos afirmar nada sin haberlo confirmado.
“La estrella de Barnard es una de las estrellas más populares debido a su cercanía y a su elevada velocidad con respecto al sistema solar. Y seguirá siendo famosa porque ahora sabemos que posee el que por el momento es el segundo planeta extrasolar más próximo. Descubierta oficialmente por el astrónomo estadounidense Edward Barnard en 1916, se halla a tan solo 5,96 años luz, un dato que la convierte en la cuarta estrella más cercana al Sol después de Proxima Centauri y el sistema doble de Alfa Centauri. Se trata de una enana roja de tipo espectral M4, así que, incluso estando tan cerca, es invisible a simple vista (su magnitud es de 9,5). Estas características han convertido la estrella de Barnard en objeto de multitud de obras de ciencia ficción —así, a bote pronto, recuerdo las novelas Hyperion de Dan Simmons o Rocheworld de Robert Forward—, pero también de observaciones científicas en busca de planetas. En los años 60 el astrónomo Peter van de Kamp se hizo famoso por el supuesto descubrimiento de uno o varios gigantes gaseosos a su alrededor mediante la técnica de astrometría usando un telescopio refractor de 61 centímetros.”
La estrella de Barnard, situada a 6 años-luz aproximadamente de nuestro Sol, o, lo que es lo mismo, a unos sesenta mil billones de kilómetros de distancia. Esta estrella parece contar con una familia de planetas. Sin embargo, es una estrella muy vieja, casi tanto como el propio universo, y, por tanto, es deficitaria en la mayoría de los elementos químicos esenciales la vida. Es poco prometedora para buscar vida en sus alrededores.
Las 10 estrellas más cercanas al Sol se encuentran en un rango de distancia los 4 y 10 años luz. tener una idea, la Vía Láctea mide unos 100.000 años luz, lo cual convierte a estas estrellas en verdaderas vecinas:
- Alfa Centauri (que, en realidad, es un sistema de tres estrellas): a 4,2 años luz.
- Estrella de Barnard: a 5,9 años luz.
- Wolf 359: a 7,7 años luz.
- Lalande 21185: a 8,2 luz
- Sirio (un sistema binario de estrellas): a 8,6 luz
- Luyten 726-8 (otro sistema binario): a 8,7 años luz.
- Ross 154: a 9,7 años luz
- Ross 248: a 10,3 años luz
- Epsilon Eridani: a 10,5 años luz.
- Lacaille 9352: a 10,7 años luz
Más allá de Barnard existe un cierto numero de estrellas, todas ellas poco prometedoras la existencia de vida y de inteligencia porque, o son demasiado pequeñas y frías para emitir la clase de luz que la vida tal como la conocemos requiere, o demasiado jóvenes como para que haya aparecido la vida inteligente en los planetas que las circundan. No encontraremos otra estrella que pueda albergar la vida y seres inteligentes hasta que no viajemos a una distancia próxima a los once años-luz del Sol.
Épsilon Eridani está situada a unos 10,5 años-luz del Sol, es una de las estrellas más cercanas al Sistema Solar y la tercera más próxima visible a simple vista. Está en la secuencia principal, de espectral K2, muy parecida a nuestro Sol y con una masa algo menor que éste, de unas 0,83 masas solares. Es joven, sólo tiene unos 600 millones de años de edad mientras que el Sol tiene 4.600 millones de años.
Épsilon emite menos luz visible y luz ultravioleta que nuestra estrella, pero probablemente sea suficiente para permitir allí el comienzo de la vida que, si tenemos en el corto tiempo que ha pasado, no llegaría a poder ser inteligente. Claro que, los cálculos realizados sobre la vida de las entrellas en general y sobre esta en particular… ¡No son fiables! Y, siendo así (que los), tampoco podemos estar seguro de lo que en sus alrededores pueda estar presente. Se le descubrió un planeta orbitando a su alrededor, Épsilon Eridani b, que se descubrió en el año 2000. La masa del planeta está en 1,2 ± 0,33 de la de Júpiter y está a una distancia de 3,3 Unidades Astronómicas. Se cree que existen algunos planetas de reciente formación que orbitan estrella.
Más allá de Épsilon Eridani hay nueve estrellas que se encuentran todavía dentro de un margen de distancia del Sol que no sobrepasan los 12 años-luz. Sin embargo, todas ellas, una, son demasiado jóvenes, demasiado viejas, demasiado pequeñas o demasiado grandes para poder albergar la vida y la inteligencia. La excepción se llama Tau Ceti.
Tau Ceti es la estrella, similar al Sol, más cercana al Sistema Solar. Así que no es sorprendente que sea un objeto de estudio. Ahora, un nuevo estudio, plantea que podría tener cuatro planetas, similares a la Tierra, a su alrededor…
Tau Ceti está situada exactamente a doce años-luz de nosotros y satisface todas las exigencias básicas para que en ella (en algún planeta de su entorno) haya podido evolucionar la vida inteligente: Se trata de una estrella solitaria como el Sol -al contrario que Alfa Centauri- no tendría dificultad alguna en conservar sus planetas que no serían distorsionados por la gravedad generada por estrellas cercanas. La edad de Tau Ceti es la misma que la de nuestro Sol y también tiene su mismo tamaño y existen señales de que posee una buena familia de planetas. No parece descabellado pensar que, de todas las estrellas próximas a nosotros, sea Tau Ceti la única con alguna probabilidad de albergar la vida inteligente.
¿Quién sabe lo que en algunos de esos planetas que orbitan la estrella Tau Ceti pudiera estar pasando? Y, luego, dadas las características de su sistema solar y la cercania que parece existir entre alguno de los mundos allí presentes, si algún ser vivo inteligente pudiera contempalr el paisaje al amanecer, no sería extraño que pudiera ser testigo de una escena como la que arriba contemplamos. ¿Es tan bello el Universo! Cualquier escena que podamos imaginar en nuestras mentes… ¡Ahí estará! en alguna parte.
Es cierto que la vida, podría estar cerca de nosotros y que, por una u otra circunstancia que no conocemos, aún no hayamos podido dar con ella. Sin embargo, lo cierto es que podría estar mucho más cerca de lo que podemos pensar y, desde luego, es evidente que el Sol y su familia de planetas y pequeños mundos (que llamamos lunas), son también lugares a tener en para encontrarla aunque, posiblemente, no sea inteligente.
Con certeza, ni sabemos cuentos cientos de miles de millones de estrellas puede haber en nuestra propia Galaxia, la Vía Láctea. Sabemos más o mneos la proporción de estrellas que pueden albergar sistemas planetarios y, sólo en nuestro entorno galáctico podrían ser cuarenta mil millones de estrellas las que pudieran estar habilitadas poder albergar la vida en sus planetas.
Estas cifras asombrosas nos llevan a plantear muchas preguntas, tales : ¿Estarán todas esas estrellas prometedoras dándo luz y calor a planetas que tengan presente formas de vida, unas inteligentes y otras no? ¿O sólo lo están algunas? ¿O ninguna a excepción del Sol y su familia. Algunos astronómos dicen que la ciencia ya conoce la respuesta a esas preguntas. Razonan que la Tierra es una clase de planeta ordinario, que contiene materiales también ordinarios que pueden encontrarse por todas las regiones del Universo, ya que, la formación de estrellas y planetas siempre tienen su origen en los mismos materiales y los mismos mecanismos y, en todas las regiones del Universo, por muy alejadas que estén, actúan las mismas fuerzas, las mismas constantes, los mismos ritmos y las mismas energías.
Planetas la Tierra y muy parecidos los hay en nuestra propia Galaxia a miles de millones y, si la vida hizo su aparición en esta paradisíaca variedad de planeta, estos astrónomos se preguntan, ¿por qué no habría pasado lo mismo en otros planetas similares al nuestro? ¿Tiene acaso nuestro planeta algo especial que sólo en él esté presente la vida? La Naturaleza, amigos míos, no hace esa clase de elecciones y su discurrir está regido por leyes inamovibles que, en cualquier circunstancia y lugar, siempre emplea los caminos más “simples” y lógicos para que las cosas resulten como nosotros las podemos contemplar a nuestro alrededor. Y, siendo así (que lo es), nada aconseja a nuestro sentido común creer que estamos sólos en tan vasto Universo.
emilio silvera
Jul
11
¡Son tantas las cosas que no sabemos!
por Emilio Silvera ~
Clasificado en Astronomía y Astrofísica ~
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El estado actual de la cuestión es que los cosmólogos creen saber que hay una gran cantidad de materia oscura en el Universo y, han conseguido eliminar la candidatura de cualquier tipo de partícula ordinaria que conocemos. En tales circunstancias no se puede llegar a otra conclusión que la materia oscura debe de existir en alguna forma que todavía no hemos visto y cuyas propiedades ignoramos totalmente. Sin embargo, se atreven a decir que, la Gravedad, es el efecto que se produce cuando la “materia oscura” pierde consistencia… , o algo así. ¡Cómo son!
Algunas teorías nos hablan de cuerdas cósmicas que suplen a la Materia oscura. ¿Quién prevalecerá?
Jul
4
¿La materia? No es fácil llegar a entenderla
por Emilio Silvera ~
Clasificado en Astronomía y Astrofísica ~
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Un átomo simple de un mismo elemento constituye, a su vez, una molécula simple del propio elemento. El oxígeno (O), hidrógeno (H), cloro (Cl), sodio (Na), cobre (Cu), hierro (Fe), plata (Ag) y el oro (Au), por ejemplo, son átomos de elementos simples y constituyen, al mismo tiempo, moléculas de cada uno de esos mismos elementos..
Átomo de cloro (Cl), cuyo número atómico es 17, de acuerdo con la suma total de electrones que posee. en sus tres órbitas (2 + 8 + 7 = 17) y átomo de sodio (Na), de número atómico 11, de acuerdo también. con la suma de la cantidad de electrones que posee (2 + 8 + 1 = 11). Como se puede apreciar, el cloro. posee 7 electrones en su última órbita, por lo cual es más propenso a captar el electrón que le falta para. completar ocho, mientras que el sodio, al tener sólo 1 electrón, es más propenso a cederlo.
Cuando los átomos de Cl y Na interaccionan por aproximarse suficientemente sus nubes electrónicas, existe un reajuste de cargas, porque el núcleo de Cl atrae con más fuerza los electrones que el de Na, así uno pierde un electrón que gana el otro.
El resultado es que la colectividad de átomos se transforma en colectividad de iones, positivos los de Na y negativos los de Cl. Las fuerzas electromagnéticas entre esos iones determinan su ordenación en un cristal, el Cl Na. Por consiguiente, en los nudos de la red existen, de manera alternativa, iones de Na e iones de Cl, resultando una red mucho más fuerte que en el caso de que las fuerzas actuantes fueran de Van der Waals. Por ello, las sales poseen puntos de fusión elevados en relación con los de las redes moleculares.
Fuerzas de van der Waals
Las moléculas de agua están formadas por un átomo de oxígeno y dos de hidrógeno separados 104,45° entre sí (H2O). Estas moléculas se unen a su vez mediante un enlace llamado “por puente de hidrógeno”, formando una red molecular más compleja.
Jun
25
¡Los Agujeros Negros no se correlacionan con la “materia...
por Emilio Silvera ~
Clasificado en Astronomía y Astrofísica ~
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Los agujeros negros se relacionan con los bulbos de las galaxias que los alojan, pero no lo hacen con los discos galácticos, los pseudobulbos o los (supuestos) halos de “materia oscura”. Así lo afirman dos estudios liderados desde la Universidad de Texas en Austin (EE UU) que fue publicado en Nature.
“Nuestro resultado más sorprendente ha sido encontrar que los agujeros negros supermasivos no están relacionados con los pseudobulbos”, destaca a SINC John Kormendy, profesor del departamento de Astronomía de la universidad de Texas de Austin (EE UU) y coautor de los dos artículos publicados en Nature.
Se considera que los agujeros negros supermasivos se encuentran en el centro de la mayoría de las grandes galaxias, y que sus masas se relacionan con los componentes del bulbo (región central llena de viejas estrellas) de sus galaxias anfitrionas.
Los investigadores han usado nuevas observaciones de las dispersiones de velocidad en las galaxias para investigar si la masa del agujero negro también se correlaciona con los pseudobulbos (bulbos que se parecen a las galaxias de disco más que a las elípticas).
Los resultados del primer estudio reflejan que los agujeros negros no se relacionan en absoluto con los discos y se correlacionan muy poco o nada con los pseudobulbos.
¿Cómo crece un agujero negro?
Los autores también sugieren dos métodos distintos de “alimentación” del agujero negro, dependiendo de si éste se encuentra en un bulbo o si está alojado en una galaxia con pseudobulbo o sin bulbo.
“Ya conocíamos que el crecimiento de los agujeros negros se producía por fusiones, que originan la suficiente energía como para que el agujero negro y la galaxia crezcan juntos”, señala Kormendy.
En el segundo método el agujero neo “come” el gas que se aproxima por procesos de azar como las colisiones de nubes de gas o el que lo atraviesa. En este caso el agujero negro unca produce la suficiente energía como para influir en el conjunto de la galaxia.
“Desconocíamos que estas dos formas de crecimiento fueran tan diferentes”, recalca el investigador.
Una relación más sencilla
Los autores plantean en un segundo artículo que casi no hay correlación entre los agujeros negros y los halos de materia oscura, a menos que la galaxia también contenga un bulbo.
“La relación entre agujeros negros y galaxias es mucho más simple y sencilla de lo que imaginábamos”, afirma el científico, que destaca: “Todas las galaxias tienen materia oscura, pero en ausencia de bulbo ésta no controla el crecimiento del agujero negro”.

Kormendy concluye: “Se pensaba que nunca seriamos capaces de comprender el crecimiento del agujero negro hasta que descubriéramos la naturaleza de la materia oscura, porque los dos están conectados. Ahora ya no tenemos que preocuparnos de tener que comprender en detalle la materia oscura para estudiar el crecimiento de los agujeros negros y la convolución de estos con las galaxias”.
Los científicos continuarán con esta línea de investigación, que ha contado con el apoyo de la National Science Foundation, pero se centrarán más en las propiedades de las galaxias huésped que en del descubrimiento de nuevos agujeros negros.
Referencia bibliográfica: John Kormendy, Ralf Bender y M. E. Cornell. “Supermassive black holes do not correlate with galaxy disks or pseudobulges”. John Kormendy y R. Bender. “Supermassive black holes do not correlate with dark matter haloes of galaxies Nature. 19 de enero de 2011. Doi: 10.1038/nature09694 y 09695.
FUENTE: SINC