martes, 16 de abril del 2024 Fecha
Ir a la página principal Ir al blog

IMPRESIÓN NO PERMITIDA - TEXTO SUJETO A DERECHOS DE AUTOR




La ciencia es asombrosa

Autor por Emilio Silvera    ~    Archivo Clasificado en Biologia    ~    Comentarios Comments (0)

RSS de la entrada Comentarios Trackback Suscribirse por correo a los comentarios

Getty Images

Primer dilema

Acaba de iniciarse el siglo XX y la experimentación con animales es habitual. Ya en la Antigua Grecia, los médicos diseccionaban cuerpos de animales ante el tabú de abrir cadáveres humanos. Hace 2.500 años, el filósofo Alcmeón de Crotona extirpó el globo ocular de un animal y observó el nervio óptico, que se dirigía desde el ojo al interior del cráneo. Fue el primero en dictaminar que el cerebro era la sede de la conciencia. Recién nacido el siglo XX, ¿crees que sigue siendo necesaria la experimentación con animales? ¿Serías capaz de hurgar en el ojo de un conejo?

Sí, lo haría

1905: Gracias al conocimiento adquirido con la experimentación en conejos, el oftalmólogo austriaco Eduard Zim lleva a cabo el primer trasplante de la historia a un humano

 

No, no lo haría

Tu rechazo congela la experimentación en conejos e impide que el oftalmólogo austriaco Eduard Zim lleve a cabo en 1905 el primer trasplante de la historia a un humano

 

Segundo dilema

En el año 1656, el célebre arquitecto inglés Christopher Wren, autor de la catedral de San Pablo en Londres, escribió una carta a un amigo: “El experimento más considerable que he hecho últimamente es este: le he inyectado grandes cantidades de vino y cerveza en la sangre a un perro vivo a través de una vena, hasta que se emborrachó por completo […]. Vomitó hasta morir”. Hoy el experimento de Wren parece salvaje, pero de alguna manera fue un éxito. La intoxicación demostró que la primera inyección intravenosa había funcionado. A principios del siglo XX, la comunidad científica intenta lograr transfusiones de perro a perro, pese a que la sangre coagula y los experimentos fracasan. ¿Apoyarías esta línea de investigación?

Sí, la apoyaría

En 1914, el médico belga Albert Hustin descubre que añadir citrato de sodio a la sangre impide que se coagule

 

No, no la apoyaría

Has interrumpido una línea de investigación que permitirá que hacia el año 2015 las transfusiones salven 80 vidas al día solo en España. En la actualidad, hay más de 100 millones de donaciones al año

 

Tercer dilema

Avanza el siglo XX y en la URSS despunta un joven biólogo, Vladímir Démijov. En 1937, con solo 21 años, ha diseñado una máquina capaz de sustituir a un corazón. Durante más de cinco horas, su aparato mantiene con vida a un perro al que previamente había extirpado el órgano cardíaco. Para algunos, Démijov es una especie de Frankenstein de los perros. En su libro Trasplante experimental de órganos vitales, describe una cirugía en la que cose un corazón a las ingles de un perro para comprobar si sigue latiendo. El ruso llega a crear un perro con dos cabezas y animales con dos corazones, a base de suturas. ¿Permitirías estos experimentos?

Sí, los permitiría

Treinta años después del primer trasplante humano, realizado en Sudáfrica, el cirujano declaró: “Si existe un padre de los trasplantes de corazón y pulmón, ese título lo ostenta, sin duda, Démijov”

 

No, no los permitiría

Renuncias a una línea de investigación que desembocó en el primer trasplante de corazón humano. En 2016, hubo casi 127.000 órganos trasplantados en el mundo, según el Registro Mundial de Trasplantes

 

Cuarto dilema

Las pioneras investigaciones con animales han permitido grandes avances científicos, pero te encuentras con otra barrera ética: la experimentación con primates no humanos. ¿Sigues adelante?

Sí, seguiría adelante

Para desarrollar la vacuna de la polio se calcula que se utilizaron 9.000 monos, 150 chimpancés y 133 voluntarios humanos. La enfermedad mataba o paralizaba a 350.000 personas al año en el mundo

 

No, no seguiría adelante

Interrumpes una línea de investigación de una enfermedad que paralizaba o mataba a 350.000 personas al año. Tus barreras éticas condenan a cientos de miles de niños a la muerte o a la invalidez

 

Quinto dilema

Es 1962, el año del éxito del Love me do de The Beatles. La ciencia avanza. La comunidad científica se plantea obtener animales genéticamente idénticos, a través de un procedimiento llamado clonación. ¿Te atreves?

Sí, me atrevería

Con la manipulación de las células se logra generar casi cualquier tipo de tejido del organismo con el que reparar órganos dañados

 

No, no me atrevería

Has abortado una línea de investigación que acabaría ganando el Nobel de Medicina de 2012, por abrir la puerta a la reprogramación celular y a la medicina regenerativa con la que reparar órganos

 

Sexto dilema

La humanidad lleva miles de años modificando los genes de otros seres vivos, mediante la selección artificial. Así, seleccionando animales con los rasgos más deseados y cruzándolos entre ellos, se pasó del lobo al perro chihuahua. A finales del siglo XX, la tecnología permite modificar los genes de los cultivos alimentarios para obtener variedades más productivas o resistentes a herbicidas. ¿Lo harías?

Sí, sí lo haría

La Academia Nacional de Ciencias de EE UU subrayó en 2016 que, tras décadas de uso, no se ha hallado “ninguna prueba” de que los alimentos modificados genéticamente tengan impacto negativo en la salud

 

No, no lo haría

Un centenar de premios Nobel calificaría tu rechazo de “crimen contra la humanidad”. Existe una corriente que apuesta por la revolución transgénica para luchar contra el hambre en el mundo

 

 

Séptimo dilema

En 2003, el equipo del microbiólogo español Francis Mojica descubrió un sistema de inmunidad hereditario presente en el ADN de muchas bacterias. Los microbios recogen información de sus atacantes —virus, por ejemplo— y la almacenan en su propio ADN, como si fueran fotografías de criminales en una comisaría. Si aparece un virus enemigo, las bacterias reconocen el material genético del agresor y envían unas tijeras moleculares para hacerlo cachos. En 2012, la historia del mundo dio un vuelco, sin exagerar. La bioquímica francesa Emmanuelle Charpentier y la química estadounidense Jennifer Doudna demostraron que el mecanismo, bautizado CRISPR, se puede utilizar como una herramienta universal para editar cualquier genoma, también el humano, como si fuera un procesador de textos. Las posibilidades son casi inimaginables. ¿Das luz verde?

Sí, daría luz verde

La comunidad científica está volcada en corregir genes defectuosos en enfermedades hereditarias. Ya se están modificado glóbulos blancos para intentar aumentar la respuesta inmune contra el cáncer

 

No, no lo permitiría

Has renunciado a una de las mayores revoluciones científicas de la historia. Los expertos creen que tiene potencial para salvar millones de vidas humanas

 

Si has contestado ‘no’ a la mayoría de las preguntas…

… y si has contestado ‘sí’ a la mayoría de las preguntas…

Mira qué han propiciado tus decisiones

Reportaje en El País

 


Deja un comentario



Comentario:

XHTML

Subscribe without commenting