
Jul
29
Fusión de galaxias
por Emilio Silvera ~
Clasificado en Caos y Complejidad ~
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El telescopio Hubble capta el «combate» entre David y Goliat, dos galaxias enfrentadas
La mayor está engullendo a la menor, pero la gravedad está cambiando el interior de ambas
Dos galaxias en fusión: la barrada NGC 1512 y la enana NGC 1510 – ESA/Hubble, NASA
Cuando dos galaxias están demasiado cerca, comienza el lento proceso de fusión. Giran una en torno a la otra, como si estuvieran bailando, aunque otros podrían decir que más bien se están midiendo y preparándose para un combate. Sea como sea, al final de este complejo proceso habrá cambiado la distribución de gas, estrellas y planetas, y en ocasiones los agujeros negros supermasivos de su interior se habrán tragado a una buena parte de la galaxia vecina.
El telescopio espacial Hubble ha fotografiado uno de estos combates, que lleva 400 millones de años ocurriendo entre una pequeña galaxia, llamada NGC 1510, y una colosal galaxia barrada, llamada NGC 1512, ambas situadas a 30 millones de años luz de la Tierra. La imagen muestra a dos galaxias de tamaño muy desigual, como David y Goliat, unidas por la gravedad y sufriendo por ello cambios muy sutiles en su apariencia. (Aquí puedes leer un artículo sobre el sombrío pasado de la galaxia NGC 1512).
La fotografía muestra otras cosas muy curiosas. Por ejemplo, la barra de NGC 1512 es como un canal de suministro de combustible cósmico, que va inyectando gas desde el exterior al interior de la galaxia y facilitando así el nacimiento de nuevas estrellas en el corazón de esta gran galaxia, en una zona que el telescopio capta en color azul. Ese criadero estelar, que ocupa una pequeña fracción de toda la galaxia, tiene un diámetro de cerca de 2.400 años luz.

Según los astrofísicos, tanto la barra como esta zona de nacimiento de estrellas son el resultado de la riña cósmica entre las dos galaxias.
NGC 1512 tiene una segunda zona de creación de estrellas más tranquila, en el enorme anillo de su parte externa. Esta zona está repleta de hidrógeno ionizado, donde enormes cantidades de este gas primigenio son bombardeadas por la radiación de estrellas vecinas recién nacidas, que hacen que el gas brille de forma muy vistosa.
Más allá de este anillo exterior, la gran galaxia tiene varios brazos, con forma de zarcillo, que llegan a envolver a la galaxia pequeña y que le someten a una intensa presión gravitacional.

En consecuencia, el gas y el polvo de la pequeña galaxia se ha arremolinado y ha comenzado a favorecer un proceso de nacimiento de estrellas muy rápido y aún más intenso que el de NGC 1512. Por eso, la pequeña David brilla con el característico azul de los lugares donde hay estrellas calientes y recién nacidas.
Pero aún hay algo más. Parte de los brazos espirales de la gran galaxia NGC 1512 en realidad le fueron arrancados a una antigua galaxia hoy desaparecida. Esta fue sencillamente desgarrada, tal como está ocurriendo ahora con NGC 1510. Por eso, se puede decir que NGC 1512 es toda una galaxia caníbal.
En conjunto, estas imágenes muestran que la interacción de galaxias, incluso si tienen un tamaño muy distinto, afecta profundamente a su funcionamiento interno e incluso activa el nacimiento de nuevas estrellas. Esto parece ser un fenómeno clave en la evolución del Universo.
Jul
28
La Cosmología y la Humanidad
por Emilio Silvera ~
Clasificado en Cosmología ~
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Queremos configurar el universo y hacemos mapas de las galaxias…
La cosmología, a pesar del paso del tiempo, continúa siendo una disciplina interesante, basada en la astronomía y la física. Tenemos la necesidad de saber cómo es nuestro mundo (el universo), incluso si esa visión es inexacta o incompleta. Los antiguos indúes, babilonios y mayas combinaron la ciencia con la religión y las estructuras sociales para completar la imagen. Pensar que nosotros, hacemos algo diferente es, engañarnos a nosotros mismos. Si la cosmología moderna parece ajena a la religión, esto es porque las hemos convertido en una auténtica religión secular. Ahora, el sitio de los dioses, es ocupado por el Universo mismo, la Naturaleza sabia que tratamos de comprender.
A diferencia de los físicos o los químicos que aceptan gustosos los desafíos de sus paradigmas, los comólogos modernos son lagashianos, es decir, defienden el modelo que ellos han elegido frente a cualquier prueba que vaya contra él. Como dijo el físico ruso Lev Landau: “Los cosmólogos caen a menudo en errores, pero nunca dudan”.
El mundo de la cosmología ortodoxa del big bang no soporta a los disidentes y, luego, hay muchos y la historia nos habla de ellos. Por poner un ejemplo, me referiré al conocido protegido de Hubble, Halton Arp, educado en Harvard y Caltech que nunca renunció al rigor intelectual de su mentor y, en consecuencia, sostenía que los corrimientos el rojo no demostraban necesariamente la existencia de un universo en expansión. Todos conocemos la calidad que como astrónomo tenía Arp y de sus renombrados descubrimientos que, en su día, llenaron las primeras portadas de toda la prensa.
Arp 147 es una pareja de galaxias en fuerte interacción localizada a unos 430 millones de años luz de la Tierra sobre la constelación de Cetus. La colisión entre ambos objetos, que una vez fueron una típica galaxia elíptica y una típica galaxia espiral, ha generado una onda expansiva de formación estelar intensa en lo que era la galaxia espiral, deformando este objeto de tal forma que tiene una estructura claramente anular.
A veces, los objetos en el cielo que aparecen extraños o diferentes de lo normal, tienen una historia que contar que puede ser científicamente valioso. Esta fue la idea del catálogo de Halton Arp de Galaxias Peculiares que apareció en los años 1960. Uno de los raros objetos listados es Arp 261, que ha sido fotografiado con mayor detalle que nunca usando el instrumento FORS2 en el Telescopio Muy Grande de ESO. La imagen contiene varias sorpresas.
Arp 261 yace a 70 millones de luz de distancia en la constelación de Libra. Su caótica y muy inusual estructura es creada por la interacción de dos galaxias. Aunque las estrellas individuales es muy raro que colisionen en este evento, ya que están muy alejadas unas de otras, las enormes nubes de gas y polvo ciertamente chocan a gran velocidad, lo que provoca nuevos cúmulos de calientes estrellas. Las órbitas de las estrellas existentes son dramáticamente alteradas, creando los remolinos que se extienden en la superior izquierda e inferior derecha de la imagen. Ambas galaxias eran probablemente enanas, no muy distintas que las Nubes de Magallanes que orbitan nuestra galaxia.
Viendo esas imágenes de increíble misterio, toda vez que esconden historias que tenemos que deducir de sus configuraciones, nos hacen caer en la de que, en realidad, todas nuestras cosmologías, desde las cosmologías sumerias y maya hasta la de los “expertos” actuales, están limitadas por una falta de visión que conlleva una enorme carencia de conocimientos. El que sabe, tiene una panorámica visual de la mente mucho más amplia que el que no tiene los conocimientos y, digamosló fuerte y claro: ¡Aún no sabemos! Innegable es que vamos avanzando y mucho pero, de ahí a decir que conocemos lo que el Universo es… hay un enorme abismo que necesita del puente del conocimiento para poder pasar al otro lado.
En los lejanos confines del Universo, a casi 13 mil millones años luz de la Tierra, unas extrañas galaxias yacen escondidas. Envueltas en polvo y atenuadas por la enorme distancia, ni siquiera el Telescopio Espacial Hubble es capaz de reconocerlas. Tendremos que esperar a su sustituto el James Webb.
James Webb Space Telescope (JWST) artist’s conception (NASA). Sabiendo todo lo que nos ha traído el Hubble, esas imágenes que nos ejaron literalmente con la boca abierta por el asombro, ¿qué no podrá traernos este nuevo ingenio que supera en mucho al anterior? Su es en honor al segundo administrador de la NASA y, sus objetivos:
- Buscar la luz de las primeras estrellas y galaxias formadas tras el supuesto big bang
- Estudiar la formación y evolución de las galaxias
- Comprender mejor la formación de estrellas y planetas
- Estudiar los sistemas planetarios y los orígenes de la vida

En su obra Cosmos, Carl Sagan describe varios mitos antiguos de la creación, que son, según escribe este autor, “un tributo a la audacia humana”. Al tiempo que llama al big bang “nuestro mito científico moderno”, señala una diferencia crucial en el sentido de que “la ciencia se plantera así misma preguntas y podemos realizar experimentos y observaciones tratar de comprobar nuestras teorías”.
Sin embargo, lo que está claro es que Sagan, se sentía muy atraído por lacosmología cíclica hindú, en la cual Brahma, el gran dios creador, consigue que un universo llegue a existir el lo sueña.
¿Qué universos soñaría Brahma? ¿Sería como nuestro? ¿Tendrían vida?
Según el experto en religiones Mircea Eliade, durante cada día brahmánico, 4.320 millones de años para ser exactos, el universo sigue su curso. Pero, al comienzo del anochecer brahmánico, el dios se cansa de todo esto, bosteza y cae en un profundo sueño. El universo se desvanece, disolviendo los tres dominios materiales que son la Tierra, el Sol y los cielos, que contiene la Luna, los planetas y la estrella Polar. (Hay cuatro dominios superiores a éstos que no se destruyen en este ciclo). La noche va pasando; entonces Brahma empieza a soñar de y otro universo empieza a existir.
Este ciclo de creación y destrucción continúa eternamente, lo cual se pone de manifiesto en el dios hinfú Siva, señor de la danza que , que sostiene en su mano derecha el tambor que anuncia la creación del universo y en la mano izquierda la llama que. mil millones de años después, destruirá este universo. Hay que decir tambien que Brahma no es sino uno de los muchos dioses que también sueñan sus propios universos, es decir, ya por aquel entonces, se hablaba y creía en los multiversos.
Alrededor de todas aquellas configuraciones del Cosmos, como era de esperar, tenían muchos rituales y celebraciones. Cinco días después de terminar Sat Chandi Mahayajna, culto a la Energía Cósmica, empezará Yoga Poornima que es el culto a su contra-parte, la Consciencia Cósmica, Shiva. Así, ambos eventos, cada uno único en su , rinden tributo a la figura materna y paterna del universo y crean un círculo completo de experiencia total. Al término de ambos eventos uno se siente saciado, completo y pleno.
Brahma la inteligencia creadora
Los 8.640 millones de años que constituyen el ciclo completo de un día y una noche en la vida de Brahma vienen a ser aproximadamente la mitad de la edad del Universo según los cálculos actuales. Los antiguos hindúes creían que cada día brahmánico duraba un kalpa, 4.320 millones de años, siendo 72.000 kalpas un siglo brahmánico, en total 311.040.000 millones de años. El hecho de que los hindúes fueran capaces de concebir el universo en miles de millones de años (en ves de hablar de los miles de millones que se solían barajar en las culturas y doctrinas religiosas primitivas occidentales) fue, según Sagan, “sin duda una casualidad”. luego es posible que fuera sólo cuestión de suerte. No obstante, la similitud entre la cosmolo´gia hindú y la cosmología actual no me parece a mí una casualidad, ahñi subyace un elevado conocimiento.
Es posible que, aquellas teorías que si las trasladamos a este tiempo, en alguinos casos no podríamos discernir si se trata de las ideas de entonces o, por el contrario son nuestras modernas ideas, con esos ciclos alternos de destrucción y creación, pudieran estar conectados y fuertemente ligados a nuestra psique humana que, al fin y al cano, de alguna manera que no hemos podido llegar a entender, está, ciertamente, conectada con el universo del que forma parte. Claro que, debemos entender y saber extrapolar los mensajes de entonces y transplantarlos al aquí y , y, aquellos redobles del tambor de Siva que sugieren el inmenso impulso energético repentino, podría ser muy bien lo que provocó nuestro big bang.
Recientemente, un prestigioso físico afirma haber hallado evidencias de un Universo anterior al nuestro, mediante la observación del fondo cósmico de microondas. Esto significaría que nuestro Universo no es único, sino que han existido otros universos con anterioridad, quizás un infinito. Es un ciclo que hasta ahora solo se creía teórico, sin ningún tipo de prueba que lo respalde. Ahora parece haberse encontrado la primera.
El descubrimiento son unos extraños patrones circulares que pueden encontrarse en la radiación de fondo de microondas del WMAP (Imagen arriba), según un artículo recientemente publicado en ArXiv.org, donde Penrose explica el fenómeno, tras analizar los extraídos de estas anomalías. Concluye que es una clara prueba de que el espacio y el tiempo existen mucho antes de nuestro Big Bang hace 13.700 millones de años, que provienen de anteriores universos que podríamos llamar “eones”, de un ciclo que se lleva repitiendo el infinito.
Nos podemos imaginar, en un largo viaje en el tiempo hacia tiempos pasados, todo lo que allí, en aquellas civilizaciones de pensaba acerca del Cosmos, las leyendas que se contaban para explicar los sucesos y con detalles, narrar lo que era el “mundo-universo” que ellos, en su ya inmensa imaginación, sibujaban de una forma muy similar a la nuestra (salvando las distancias), toda vez que, en lo esencial, muchas son las coincidencias de ayar y hoy. ¿Quiere eso decir que hemos adelantado muy poco? Todo lo contrario, hemos adelantado muchísimo para poder comprobar que, muchos de aquellos postulados de hace miles de años, eran ciertas y apuntaban en la correcta dirección.
emilio silvera
Jul
28
Captan el nacimiento de un Agujero Negro
por Emilio Silvera ~
Clasificado en El Universo asombroso ~
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Observan desde el Teide el ‘parto’ más nítido que nunca de un agujero negro
El Instituto de Astrofísca de Canarias (IAC) acaba de hacer público un hallazgo científico de carácter mundial logrado con un pequeño telescopio robótico de 40 centímetros de la Universidad de Moscú, instalado en el Observatorio del Teide, que revoluciona toda la información de la que se disponía hasta ahora sobre las circunstancias en las que se produce un agujero negro. Un satélite de la NASA lanzó la alerta de que una superestrella estaba colapsando el Universo, dando lugar a un agujero negro.
La investigación, encabezada por la Universidad de Maryland (EEUU), detectó esa emisión a través del uso de telescopios espaciales y terrestres y esos datos les permitió describir con gran precisión uno de los fenómenos astrofísicos más esquivos. El equipo de expertos, que ha bautizado esta emisión de rayos gamma como “GRB160625B”, obtuvo detalles clave sobre su fase inicial “rápida” de ráfagas, así como de la evolución de los grandes chorros de materia y energía que generan esas primeras explosiones.
“Las ráfagas de rayos gamma son eventos catastróficos, vinculados a las explosiones de estrellas enormes, cincuenta veces más grandes que nuestro sol”, explica en un comunicado Eleonora Troja, del departamento de astronomía de la UMD. Si se elaborase una lista de las explosiones más poderosas ocurridas en el Universo, indica la experta, las de rayos gamma se situarían “justo por detrás del Big Bang”.
El telescopio robótico del Teide MASTER-IAC fue el primero de mundo que captó la alerta y apuntó hacia el lugar del parto, teniendo la oportunidad providencial de vivir en el primer instancia, es decir, en los primeros segundos, qué ocurre cuando tal fenómeno se origina. Así pudo comprobar por primera vez que cuando la estrella colapsa y el agujero negro está en fase embrionaria se desata un fuerte chorro de material y energía, equivalente a toda la energía que libera el sol a lo largo de toda su existencia. Lo que es más importante del descubrimiento del telescopio del IAC es que pudo presenciar que en ese primer instante se origina un campo magnético, extremo desconocido hasta ahora, que condiciona la polarización de la luz. “El descubrimiento nos llena de orgullo, pero sobre todo es una gran aportación a la ciencia”, declaró a DIARIO DE AVISOS el director de IAC, Rafael Rebolo. “Nuestro pequeño telescopio robótico ha tenido el honor de captar la alerta y medir por primera vez en la historia la polarización de la energía, y averiguar cómo es el campo magnético en ese momento. Esto no es cualquier cosa, sino un gran avance, porque nos permitirá seleccionar los modelos para posteriores estudios de agujeros negros, pudiendo ir a partir de ahora con más precisión que nunca”.
El hallazgo del telescopio robótico de la Universidad de Moscú instalado en el Observatorio del Teide en Tenerife constituye toda una sorpresa para los investigadores especializados en agujeros negros. El pequeño instrumento inaugurado hace dos años por el rey Felipe VI consiguió este éxito mundial en junio del año pasado, y ahora ha trascendido en vísperas de su publicación mañana en la prestigiosa revista científica ‘Nature’.
Un satélite de la NASA, llamado Fermi (en honor de uno de los físicos italianos más relevantes del siglo XX) dio la alerta sobre el nacimiento d un agujero negro. El telescopio tinerfeño fue el primero en detectar esa señal y dirigir su ojo hacia el lugar de los hechos. Pudo observar el chorro de materia y radiación que se produce en ese primer instante. Fue testigo excepcional porque se había producido una primer micro estallido de la superestrella que de inmediato fue seguido por otro estallido que duró más tiempo (medido en apenas segundos).
El robot pudo medir la polarización de la luz (filtrado de las ondas) y determinó que se genera un campo magnético. El chorro de partículas de radiación está muy polarizada ya en ese momento inicial, algo inédito hasta ahora. “Es como un cañón de altísima energía, más propio de la ficción de la Guerra de las Galaxias, pero sí ocurre en la realidad”, bromeó Rafael Rebolo, director del IAC en declaraciones a DIARIO DE AVISOS. Según Rebolo, en otras observaciones hasta ahora se sabía que había una gran explosión de rayos gamma (un estallido super masivo que se dirigió hasta nuestro Sistema Solar), pero esta vez ha sido tan intenso que cabría afirmar que es la primera vez que se ha podido divisar de modo visible.
Se trata de una medición de radiación visible. En pocos segundos se desató una liberación de energía tal que equivaldría a la del sol en toda su vida. “Hemos podido ser los primeros y afinar en la medición sobre no de los fenómenos más importantes en el Universo actual”, declaró Rebolo.
“Con telescopios pequeños se puede hacer también ciencia de primera línea”, señaló Rebolo sobre este aparato robótico de pequeñas dimensiones el MASTER-IAC de la Universidad de Moscú, instalado en el Teide y autor del hallazgo. Su especialidad es la búsqueda de fenómenos energéticos del Universo. Esta ha sido una especia de debut milagroso del telescopio según el máximo responsable del IAC. El hallazgo se produjo en junio de 2016 y se conoce ahora en vísperas de su publicación mañana en la revista ‘Nature’.
Todos lo concerniente a los agujeros negros genera una gran expectación en el mundo entero. El físico teórico Stephen Hawking mostró su interés y fascinación por los mismo durante su visita a la sede del IAC y departió sobre el fenómeno con uno de sus máximos expertos, Rafael Rebolo, uno de los directores de la investigación ahora dada a conocer. Hasta ahora se sabía que la energía estaba polarizada en etapas avanzadas de la generación de un agujero negro, “pero se desconocía que también se produjera tan temprana”.
Para Rebolo uno de los aspectos más positivos de este descubrimiento es que la alerta de estallidos de rayos gamma la produjo un satélite de la NASA (Estados Unidos) y el primer telescopio en captarla fue este pequeño instrumento robótico de la Universidad de Moscú instalado en Tenerife. “Entre Estados Unidos y Rusia hemos estado nosotros, el IAC, lo que significa un tanto para Canarias y España y demuestra que en ciencia puede establecerse una colaboración noble sin fronteras. Solo el tiempo dirá”, señaló el alcance de este hallazgo en el historia del IAC, pero ya supone la primera investigación de este año para la ciencia mundial de los agujeros negros.
Jul
27
¿Sabremos alguna vez, quiénes somos?
por Emilio Silvera ~
Clasificado en El Universo y la Química de la Vida ~
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En una supernova, en orden decreciente tenemos la secuencia de núcleos H, He, O, C, N, Fe, que coincide bastante bien con una ordenación en la tabla periódica que es:
H, He, (Li, Be, B) C, N, O… Fe
No pocas veces hemos referido aquí el maravilloso suceso que está presente en las estrellas que mediante la fusión nuclear, transforma los elementos sencillos en otros más complejos y, cuando agotado el ciclo y no pueden continuar fusionando los materiales pesados que les quedan, dependiendo de sus masas se transforman en gigantes rojas y finalmente en enanas blancas (como le pasará a nuestro Sol), dejando una bonita Nebulosa Planetaria, y, si la estrella es masiva, su final será mediante la explosión como Supernova que regará el espacio interestelar con el remanente de materiales pesados y la estrella, en su mayor parte, se convertirá en una estrella de Neutrones, o, si es una supermasiva, en Agujero Negro.
Lo curioso y asombroso del caso es que, a partir de esos materiales, se forman nuevas estrellas y nuevos mundos y, en algunos de esos mundos que se sitúan en la zona adecuada para la habitabilidad, donde el agua corre líquida y se ha formado una atmósfera adecuada y océanos, con el paso del tiempo, esa materia primordial se acomoda en estructuras complejas y surge la Vida.
La imagern de arriba, SN 1987A, es la descomunal explosión de supernova, cuando ocurrió, la potencia de miles de soles cambió, momentáneamente, la región del espacio conocida como Nube Mayor de Magallanes, a muchos años luz de la Tierra.
¡Qué maravilla! Las estrellas brillan en el cielo para hacer posible que nosotros estemos aquí descubriendo los enigmas del universo y… de la vida inteligente que esas mismas estrellan han posibilitado, creo que, en muchos mundos que son en las galaxias del universo.
Pero está claro que todo el proceso estelar evolutivo inorgánico nos condujo desde el simple gas y polvo cósmico a la formación de estrellas y nebulosas solares hasta los planetas, la Tierra en particular, en cuyo medio ígneo describimos la formación de las estructuras de los silicatos, desplegándose con ello una enorme diversidad de composiciones, formas y colores, asistiéndose, por primera vez en la historia de la materia, a unas manifestaciones que contrastan con las que hemos mencionado en relación al proceso de las estrellas.
Desde el punto de vista del orden es la primera vez que nos encontramos con objetos de tamaño comparables al nuestro, en los que la ordenación de sus constituyentes es el rasgo más característico.
Al mismo tiempo nos ha parecido reconocer que esos objetos, es decir, sus redes cristalinas “reales”, almacenan información (memoria) que se nos muestra muy diversa y que puede cobrar interés en ciertos casos, como el de los micro-cristales de arcilla, en los que, según Cairns-Smith, puede incluso llegar a transmitirse.
Porque, ¿qué sabemos en realidad de lo que llamamos materia inerte? Lo único que sabemos de ella son los datos referidos a sus condiciones físicas de dureza, composición, etc; en otros aspectos ni sabemos si pueden existir otras propiedades distintas a las meramente físicas.
¿No os hace pensar que nosotros estemos hechos, precisamente, de lo que llamamos materia inerte?
Pero el mundo inorgánico es sólo una parte del inmenso mundo molecular. El resto lo constituye el mundo orgánico, que es el de las moléculas que contienen carbono y otros átomos y del que quedan excluidos, por convenio y características especiales, los carbonatos, bicarbonatos y carburos metálicos, los cuales se incluyen en el mundo inorgánico.
En Titán existen moléculas de Carbono necesarias para la vida
Según decía en algún trabajo anterior, los quarks up y down se hallan en el seno de los nucleones (protones y neutrones) y, por tanto, en los núcleos atómicos. Hoy día, éstos se consideran como una subclase de los hadrones. Sin embargo, debemos tener claro que toda la materia del Universo (al menos la conocida), está conformada por Quarks y Leptones.
La composición de los núcleos (lo que en química se llama análisis cualitativo) es extraordinariamente sencilla, ya que como es sabido, constan de neutrones y protones que se pueden considerar como unidades que dentro del núcleo mantienen su identidad. Tal simplicidad cualitativa recuerda, por ejemplo, el caso de las series orgánicas, siendo la de los hidrocarburos saturados la más conocida. Recordad que su fórmula general es CnH2n+2, lo que significa que una molécula de hidrocarburo contiene n átomos de carbono (símbolo C) y (2n+2) átomos de hidrógeno (símbolo H).
El número de protones y neutrones determina al elemento, desde el hidrógeno (el más simple), al uranio (el más complejo), siempre referido a elementos naturales que son 92; el resto son artificiales, los conocidos transuránicos en cuyo grupo están el einstenio o el plutonio, artificiales todos ellos.
Científicos descubrieron posibles cráteres que expulsan hielos, llamados criovolcanes. (15 Diciembre, 2010 NASA – CA) Con el sistema de radar e imágenes infrarrojas de la sonda Cassini, que orbita Saturno, científicos han encontrado evidencias de lo que podría ser un volcán de hielo en Titán. Este pequeño mundo haría las delicias de cualquier químico de la Tierra y, no digamos de los geólogos. (4 Enero 2007 – NASA/Agencias – CA) Fue comprobada la predicción sobre la existencia de lagos de metano líquido en Titán.
Pero, si hablamos de los núcleos, como sistemas dinámicos de nucleones, pertenecen obviamente a la microfísica y, por consiguiente, para su descripción es necesario acudir a la mecánica cuántica. La materia, en general, aunque presumimos de conocerla, en realidad, nos queda mucho por aprender de ella.
Hablemos un poco de moléculas.
Molécula de fullereno, dinitrógeno, agua y la representación poliédrica del anión de Keggin, un polianión molecular
El número de especímenes atómicos es finito, existiendo ciertas razones para suponer que hacia el número atómico 173 los correspondientes núcleos serían inestables, no por razones intrínsecas de inestabilidad “radiactiva” nuclear, sino por razones relativistas. Ya antes me referiría a las especies atómicas, naturales y artificiales que son de unos pocos millares; en cambio, el número de moléculas conocidas hasta ahora comprende varios millones de especímenes, aumentando continuamente el número de ellas gracias a las síntesis que se llevan a cabo en numerosos laboratorios repartidos por todo el mundo.
Una molécula es una estructura con individualidad propia, constituida por núcleos y electrones. Obviamente, en una molécula las interacciones deben tener lugar entre núcleos y electrones, núcleos y núcleos y electrones y electrones, siendo del tipo electromagnético.
Debido al confinamiento de los núcleos, el papel que desempeñan, aparte del de proporcionar la casi totalidad de la masa de la molécula, es poco relevante, a no ser que se trate de moléculas livianas, como la del hidrógeno. De una manera gráfica podríamos decir que los núcleos en una molécula constituyen el armazón de la misma, el esqueleto, cuya misión sería proporcionar el soporte del edificio. El papel más relevante lo proporcionan los electrones y en particular los llamados de valencia, que son los que de modo mayoritario intervienen en los enlaces, debido a que su energía es comparativamente inferior a la de los demás, lo que desempeña un importante papel en la evolución.
Esta nebulosa llena de color, denominada NGC 604, es uno de los mayores y mejores ejemplos de nacimiento estelar en una galaxia cercana. La nebulosa NGC 604 es semejante a otras regiones de formación de estrellas en la Vía Láctea que nos resultan familiares, como la nebulosa de Orión, pero en este caso nos hallamos ante una enorme extensión que contiene más de 200 brillantes estrellas azules inmersas en una resplandeciente nube gaseosa que ocupa 1.300 años-luz de espacio, unas cien veces el tamaño de la Nebulosa de Orión, la cual aloja exactamente cuatro estrellas brillantes centrales. Las luminosas estrellas de NGC 604 son extremadamente jóvenes, ya que se han formado hace tres millones de años.
Las moléculas diatómicas de hidrógeno abundan en el espacio interestelar. NGC 604, una enorme región de hidrógeno ionizado en la Galaxia del Triángulo. Son muchas las moléculas descubiertas en estas nebulosas y se cree que son el material que más tarde forman los mundos y, si tienen la suerte de caer en la zona habitable de la estrella que les dará luz y calor, esas moléculas se unirán para construir estructuras más complejas que las lleven hasta la vida.
Desde las moléculas más sencilla, como la del hidrógeno con un total de 2 electrones, hasta las más complejas, como las de las proteínas con muchos miles de ellos, existe toda una gama, según decía, de varios millones. Esta extraordinaria variedad de especies moleculares contrasta con la de las especies nucleares e incluso atómicas.
Sin entrar en las posibles diferencias interpretativas de estas notables divergencias, señalaré que desde el punto de vista de la información, las especies moleculares la poseen en mucho mayor grado que las nucleares y atómicas.
¿La molécula sintética más grande del mundo? Bueno, en la naturaleza existen muchas moléculas de gran tamaño, un claro ejemplo son las proteínas o el ADN, y son grandes debido a que están formados por la unión de muchas moléculas más pequeñas. Las proteínas están formadas por la unión de aminoácidos, y el ADN por la unión de nucleótidos.
Dejando aparte los núcleos, la información que soportan los átomos se podría atribuir a la distribución de su carga eléctrica, y en particular a la de los electrones más débilmente ligados. Concretando un poco se podría admitir que la citada información la soportan los orbitales atómicos, pues son precisamente estos orbitales las que introducen diferencias “geométricas” entre los diferentes electrones corticales.
Justamente esa información es la que va a determinar las capacidades de unión de unos átomos con otros, previo el “reconocimiento” entre los orbitales correspondientes. De acuerdo con la mecánica cuántica, el número de orbitales se reduce a unos pocos. Se individualizan por unas letras, hablándose de orbitales s, p,d, f, g, h. Este pequeño número nos proporciona una gran diversidad.
De los orbitales hablamos aquí extensamente muy a menudo
La llamada hibridación (una especie de mezcla) de orbitales es un modo de aumentar el número de mensajes, esto es, la información, bien entendido que esta hibridación ocurre en tanto y en cuanto dos átomos se preparan para enlazarse y formar una molécula. En las moléculas, la información, obviamente, debe abarcar todo el edificio, por lo que en principio parece que debería ser más rica que en los átomos. La ganancia de información equivale a una disminución de entropía; por esta razón, a la información se la llama también negantropía.
En términos electrónicos, la información se podría considerar proporcionada por un campo de densidad eléctrica, con valles, cimas, collados, etc, es decir, curvas isoelectrónicas equivalentes formalmente a las de nivel en topografía. Parece razonable suponer que cuanto más diverso sean los átomos de una molécula, más rica y variada podrá ser su información, la información que pueda soportar.
La enorme variedad de formas, colores, comportamientos, etc que acompaña a los objetos, incluidos los vivientes, sería una consecuencia de la riqueza en la información que soportan las moléculas (y sus agregados) que forman parte de dichos objetos. Ello explicaría que las moléculas de la vida sean en general de grandes dimensiones (macromoléculas). La inmensa mayoría de ellas contiene carbono. Debido a su tetravalencia y a la gran capacidad que posee dicho átomo para unirse consigo mismo, dichas moléculas pueden considerarse como un esqueleto formado por cadenas de esos átomos.
El carbono no es el único átomo con capacidad para formar los citados esqueletos. Próximos al carbono en la tabla periódica, el silicio, fósforo y boro comparten con dicho átomo esa característica, si bien en un grado mucho menor. De todas las maneras y, sin descartar nada, creo que las formas de vida que podamos encontrar en el Universo, al menos la mayoría, estarán basadas, como nosotros, en el Carbono que, por sus características especiales, es el más idóneo para la vida.
emilio silvera
Jul
26
NASA Selecciona una Misión Para Estudiar los Agujeros Negros
por Emilio Silvera ~
Clasificado en Agujeros negros ~
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Los objetos más extraños del Universo: Horizonte de Susceos y Singularidad
La NASA ha seleccionado una misión científica que permitirá a los astrónomos explorar, por primera vez, los detalles ocultos de los de algunos de los objetos astronómicos más extremos y exóticos, tales como agujeros negros estelares y supermasivos, estrellas de neutrones y púlsares.
Los púlsares, son Estrellas de Neutrones girando a gran velocidad
Los objetos tales como los agujeros negros pueden calentar los gases circundantes a más de un millón de grados. La radiación de alta energía de rayos X de este gas puede ser polarizada, vibrando en una dirección particular. La misión Imaging X-ray Polarimetry Explorer (IXPE) transportará tres telescopios espaciales con cámaras capaces de medir la polarización de estos rayos X cósmicos, permitiendo a los científicos responder preguntas fundamentales sobre estos entornos turbulentos y extremos donde los campos gravitatorios, eléctricos y magnéticos están en sus límites.
“No podemos ver directamente lo que está pasando cerca de objetos como agujeros negros y estrellas de neutrones, pero estudiar la polarización de los rayos X emitidos desde sus entornos revela la física de estos enigmáticos objetos”, dijo Paul Hertz, director de división de astrofísica de la Dirección de Misiones Científicas de la NASA en Washington. “La NASA tiene una gran historia de lanzamiento de observatorios en el Programa de Exploración Astrofísica con nuevas y únicas capacidades de observación. IXPE abrirá una nueva ventana en el universo para que los astrónomos puedan mirar a través. Hoy, sólo podemos adivinar lo que vamos a encontrar”.
El Programa de Exploración de Astrofísica de la NASA solicitó propuestas para nuevas misiones en Septiembre de 2014. Se presentaron 14 propuestas y se seleccionaron tres conceptos de misión para su revisión adicional por un grupo de expertos y científicos externos. La NASA determinó que la propuesta IXPE proporcionaba el mejor potencial científico y el plan de desarrollo más factible.

La NASA ha seleccionado una misión científica que permitirá a los astrónomos explorar, por primera vez, los detalles ocultos de los de algunos de los objetos astronómicos más extremos y exóticos, tales como agujeros negros estelares y supermasivos, estrellas de neutrones y púlsares. Image Credit: NASA
Fuente: NASA