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Nada es lo que parece que es

Autor por Emilio Silvera    ~    Archivo Clasificado en General    ~    Comentarios Comments (2)

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Si este de arriba fuera el Campo de Higgs, esas briznas ¿serían las cuerdas vibrantes que dan masa a las partículas? Todos oímos hablar del Campo de Higgs pero, pocos saben que la idea, no es de ahora y que, en realidad, ese campo se descubrió hace muchos siglos en la antigua India, con el nombre de maya, que sugiere la idea de un velo de ilusión para dar peso a los objetos del mundo material.

El problema de la masa no está resuelto. Todas las partículas tienen masas diferentes pero nadie sabe de donde salen sus valores. No existe fórmula alguna que diga, por ejemplo, que el quark extraño debe pesar el doble  (o lo que sea) que el quark arriba, o que el electrón debe tener 1/200 (u otra proporción) de la masa del muón. Las masas son de todo tipo y sería preciso que, de una vez por todas, pudiéramos conocer el por qué, la Naturaleza, ha decicido que así sea. Según lo que podemos saber de otras cuestiones, cuando es así es porque existe una razón para ello pero, ¿qué razón? En realidad, ¿por qué han de tener masa las partículas? ¿de dónde les viene la masa?

Como no lo sabemos, hemos recurrido a lo de siempre, nos inventamos el Campo de Higgs y…se tapó el agujero por el que se ve nuestra ignorancia, siempre hacemos lo mismo. Con la “materia oscura” ha pasado igual y, de momento, ni el Campo de Higgs con su Bosón ni la “materia oscura”, han dado la cara. Sí, han dicho…, han publicado…, en el LHC se han formulado declaraciones… pero, a pesar de todo eso, ni está confirmado el Campo de Higgs ni su Bosón proporcionador de materia…¡Ya veremos! Si la imagen de abajo se confirma…de verdad.

Ha habido dos momentos de grandes cambios en la Física occidental. El primero llegó con Galileo y Newton, que hicieron que la ciencia abandonara los antiguos ideales griegos de la razón pura, haciéndola rigurosa y dependiente de los datos experimentales y de la causalidad, rechando conceptos tales como que la luz es una “cualidad”, e intentándo cualificar cosas tales como luz y las fuerzas de la materia. Algunos, como Weinberg, siguen considerando a Newton como el científico más importante que ha existido:

“Transformó el mundo intelectual que había creado Aristóteles” . En cuanto a la metodología y la forma de ver el mundo, Weinberg dice que tofavía vivímos en el mundo de Isaac (los físicos actuales tratan a Aristóteles con ciertto desdén).

Otro gran paso de la Fisica se produjo cuando llegó la Teoría cuántica, unos años más tarde de que Max Planck escribiera aquel famoso artículo de ocho páginas en el que dejó sentada sus bases y nos habló del “cuanto” de acción h, que nos llevaba a la convicción de que la energía se transmitia de manera no continua a través de paquetes dicretos…”los cuantos”.

Galileo, Newron, Faraday el experimentador y su colega Maxwell el teórico, entre otros, levantaron el inmenso edificio de la física clásica. Conocíamos la mecánica  del movimiento de los objetos, como se propagaba la radiación electromagnética por el universo; teníamos una enorme cantidad de conocimientos relativos al mundo físico. Por ejemplo, la segunda Ley de Newton, F = ma (fuerza igual a masa por acelración)es uno de los mantras de la física clásica. Más tarde los físicos cuánticos descendieron a las profundidades del átomo y descubrieron un nuevo mundo.

TIEMPO A TRAVES DEL CRISTAL

El premio nobel 2004, Frank Wilczek como un gran creativo de la física, nunca decepciona. Este profesor, famoso por sus trabajos en cromodinámica cuántica (QCD), la teoría que explica el micromundo existente dentro de las llamadas partículas elementales, vuelve a poner las leyes de la Física patas arriba con su más reciente teoría, en la que presenta un sorprendente tipo de cristal –time crystal- que a diferencia de los cristales convencionales no ofrece regularidad en el espacio, sino en el tiempo. Sería una nueva organización de la materia en la que la estructura se repite periódicamente en el tiempo, a diferencia de la periodicidad espacial de los cristales convencionales.

Frank Wilczek, del Instituto Tecnológico y de Massachussettsi y Al Shapere de la Universidad de Kentucky, discuten esta cuestión y la conclusión a la que han llegado es que la simetría del tiempo parece tan frágil como la simetría espacial a bajas energías.Este proceso debe conducir a una periodicidad que ellos llaman “cristales de tiempo”. Es más, los cristales del tiempo existen probablemente, y delante de nuestras propias narices.

Como veis, todos los días aparecen ideas nuevas que bien desarrolladas pueden ser el futuro pero de momento, parece que son las leyes de Newton y Einstein y Maxwell  las que gobiernan el macromundo y, las de Planck el micromundo.

Demócrito de Abdera, Tracia, Grecia, ca. 460 a. C. – ca. 370 a. Conocido como el “filósofo risueño” porque le pertían las debilidades de los hombres, también recibe a veces el nombre de “padre de la física de partículas”. Tuvo algunas ideas que se anticipaban al futuro. En un momento dado de su vida cayó en una profunda y estuvo decidido a dejarse morir de hambre. Sus hermanas le tendieron una trampa astuta. Cuando estaban preparando comidas para celebrar la fiesta de Deméter, se pusieron a hornear pan. El aroma del pan flotó en el aire hasta llegar a su habitación y le hizo revivir; no sólo en el aspecto físico, sino en el intelectual también. Ante aquel hecho, él se planteó una pregunta: ¿cómo se desplaza el aroma de pan desde la cocina que se encuentra abajo hasta su dormitorio situado en el piso superior? Su respuesta fue: ¡El Átomo!, lo que no puede ser pidido. Imaginó que de los panes se desprendían átomos que viajaban hasta nariz.Demócrito formuló la hipótesis de que toda la materia está formada por partículas finitas, invisibles e inpisibles que se combinan de persas maneras para constituir todos los objetos que vemos a nuestro alrededor.

El hombre, con aquella idea original, se ganó un lugar en la Historia y, sin embargo, parece que tampoco él fue el primero que desarrolló esas ideas que, originalmente, pudieran ser atribuídas a los “metafísicos” hindues que descubrieron el concepto de ártomo siglos antes que Demócrito, que descubrió muchos conceptos aceptados actualmente por los físicos. La afrimación de Demócrito, según la cual “Todo es fruto del azar o de la necesidad” podría ser el lema definitorio de la teoría cuántica. Es decir, la aleatoriedad y la causalidad van de la mano. No podemos prodecir, por ejemplo, cuando se desintegrará un pión concreto, pero si podemos anticipar cuando lo hará la mitad de un grupo de esta clase de partículas de la que podemos conocer sus vidas medias. Demócrito decía que… “Nada existe excepto el átomo y el espacio vacío”, y continuaba… “rodo lo demás son opiniones”.

Sin embargo, en general, sus teorías fueron rechazadas posteriormente por algunos griegos importantes: Aristóteles y Platón por nombrar algunos. De hecho, Platón deseaba quemar todos los libros de Demócrito. Leucipo, Demócrito y otros  folósofos griegos presocráticos buscaron explicaciones del mundo que eran más cuantitativas que cualitativas y plantearon la pregunta “¿cómo?” en vez de “¿por qué?”, a diferencia de los planteamientos más abstractos y teológicos de otros griegos posterriores.

[Eidolon: Un eidolon (en griego «ειδωλον»; imagen, fantasma, aparición que rodea a toda materia.

Uno de los conceptos de Demócrito que fue bien aceptado por todos sus colegas griegos y permaneci´ço vigente hasta el Renacimiento, fue el Eidolon. No fue una de sus mejores ideas pero, como la luz fascinó a todas las culturas antiguas y medievales (creo que a la nuestra también, aunque de otra manera) por lo que gran parte de su física estuvo centrado en ella, en la luz misteriosa luz. Así, dos conceptos incubados en la Grecia antigua y que fascinaron a Occidente fueron el rayo y el eidolon.

En el siglo V a. C., Empédocles  (más conocido por afirmar que toda la amteria está formada por tierra, aire, fuego y agua) sugirió que la visión se produce porque un rayo visual sale del ojo…

y cae sobre lo que este tiene enfrente , el aojo así, participa directamenter de la visión , enviando unos rayos a modo de sonda para captar la información visual. Unas pocas décadas después, Demócrito descubrió el eidolon. Del mismo modo que los objetos desprehnden átomos , decía Demócrito, también desprende una fina capa visual de su propia materria, siendo quizñá de un átomo el espesor de esta capa. Esto es el eidolon, un caparazón físico que tienen todos los objetos y que flota a través del espacio hasta el ojo del observador. Actualmente sabemos que los rayos no emanan de los ojos. Los científicos árabes descartaron esa teoría que ya os contaré otro día.

Habeis visto como, desde los tiempos más antiguos, siempre hemos inventado conceptos que pretendían explicar lo que explicar no sabíamos y, ahora, ¡seguimos igual! echamos mano de “la materia oscura” y otros conceptos que no sabemos, si al final serán lo que decinmos que son.

emilio silvera

 

  1. 1
    Sigfrido Samet
    el 20 de septiembre del 2013 a las 16:34

    Ud. menciona la antigua teoría de los “rayos visuales”. Recuerdo haber visto pintura religiosa en la que de los santos salían rayos luminosos que iban hacia la cruz. No consigo localizar esos cuadros. ¿Podría alguien darme alguna información al respecto? Muchas gracias. 

    Responder
    • 1.1
      emilio silvera
      el 21 de septiembre del 2013 a las 5:15

      Muy Señor mío:
      Siento decirle que no le puedo ayudar en eso y, desde luego, no es este el mejor lugar para solicitar esa información. Aquí prevalece la Física y la Astronomía, ciencias que se alejan de la religión y dejan a un lado la fe para creer en lo que se puede “ver” y “tocar”, es decir, en lo que se comprueba una y mil veces antes de darlo por bueno.
      Sintiéndolo mucho le envío un cordial saludo.

      Responder

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